La semana pasada se realizó una votación que decidirá cómo iba a continuar la medida de fuerza en la provincia y lo que se decidió es que, para esta semana, están previstos tres días de paro que se iniciarán el martes 23 y terminarán el jueves 25.

Es decir, que los estudiantes sólo tendrán clases el lunes 22 y el viernes 26, pero el martes 30 y miércoles 31 de agosto se interrumpirán nuevamente. Lo mismo ocurrirá el jueves 1 de septiembre.

Además, este viernes el Ministerio de Educación iba a tener una jornada docente apuntada a los secundarios, esto quiere decir que los alumnos iban a tener únicamente clases el lunes de esta semana. Al darse cuenta de esta situación, finalmente desde el Gobierno decidieron posponer la actividad.

No obstante, el Gobierno de Santa Fe pidió que se revea la medida de fuerza porque entendían que el reclamo estaba saldado con la convocatoria. De todas formas esto no fue bien recibido por los docentes que dijeron que la situación podría complicarse aún más.

"El derecho de huelga es un derecho garantizado constitucionalmente, esto implica que no se pueden adoptar represalias por llevar adelante la huelga. Distinta es la situación respecto de los días no trabajados, porque allí la no liquidación corresponde a que en determinado día no se prestó el servicio”, explicó Juan Manuel Pusineri, Ministro de Trabajo de la provincia.