En marzo de este año se realizó una audiencia imputativa a Leonardo T., un tatuador de la ciudad de San Lorenzo, por un hecho de abuso sexual contra una joven de 18 años, ocurrido en julio de 2018. Cinco años después, la víctima se encuentra a la espera de un juicio y lograron obtener el examen de ADN que confirma que el hecho sucedió.
Florencia se dirigió el 3 de julio de 2018 a realizar una sesión de Shibari con Leonardo T., un reconocido tatuador de San Lorenzo, hasta que, según declaraciones de la denunciante la obligó a practicarle sexo oral y eyaculó sobre su cuerpo. “Salí de ahí y me fui directamente a denunciar a la comisaria”, expresó Florencia.
El tatuador fue imputado por abuso sexual con acceso carnal gravemente ultrajante y por la gravedad puede afrontar un pedido alto de pena. La joven esperaba la prueba de ADN entre la ropa que tenía restos de semen y la prueba de sangre que se realizó el presunto abusador en diciembre de 2022. Cabe destacar que en la primera citación para la extracción de sangre el hombre no se presentó y que actualmente se encuentra en libertad.
“Estos cinco años para mí fueron terribles esperando, y ahora sé que tengo la posibilidad de poder resolverlo, pero siempre y cuando la justicia sea justa conmigo y con las demás.
Espero que esta vez salga como tiene que salir, porque muchos años me reprimí cosas y lugares, mientras él siguió trabajando como si nada, poniendo en riesgo también a otras mujeres”, expresó Florencia en diálogo con 11Noticias.
El hecho
Florencia, en diálogo con 11Noticias, contó lo ocurrido: “Él además de tatuar hacia Shibari, esa noche me comenta como funciona, me gustaba por lo artístico, no me pareció nada raro y el 3 de julio fui a hacer la sesión, hicimos dos, todo bien y en la tercera el abusa de mi con toqueteos sin mi consentimiento”.
“Le pido que me baje y me desate, el agarra y me lleva de los pelos a una de las máquinas que había en el gimnasio, esto paso en el gimnasio Urban de San Lorenzo, y ahí me obliga a practicarle sexo oral, en un momento eyacula en mi cuerpo, salí de ahí y me fui directamente a denunciar a la comisaria”, expresó Florencia.
El shibari es una técnica artística que implica atar a la persona siguiendo ciertos principios estéticos, y empleando cuerdas generalmente de fibras naturales.
Tras la denuncia la joven dejó su ropa para que sea examinada y realizó la revisión con el médico forense. “La pericia psicológica fue un año después de que denuncie y durante 4 años no tuve ninguna respuesta, hasta que me puse un abogado y logramos una audiencia imputativa”, contó la joven.