En el marco del Encuentro Anual de la Industria Pesquera Argentina, que se desarrolla este jueves en la ciudad de Puerto Madryn, el Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo emitió un contundente comunicado para repudiar las tradicionales prácticas de reducción salarial ante el primer escollo que sufre la actividad. Al mismo tiempo, puso sobre la mesa un prometedor análisis sobre los consumos de combustibles y el impacto de los impuestos.
“Desde el Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo, repudiamos enérgicamente cualquier intento de reducción salarial en el sector pesquero. En un contexto de crisis, los trabajadores no pueden ser la variable de ajuste. Exigimos el cumplimiento de los acuerdos salariales vigentes y rechazamos cualquier medida que precarice las condiciones laborales. Convocamos al diálogo responsable con el sector empresarial y las autoridades para garantizar el respeto de los derechos de los trabajadores”, expresa el documento.
El gremio entiende que la preocupación de algunos actores del sector pesquero argentino se centra en la implementación de un Régimen de Derechos de Exportación con alícuota del 0% para los productos y/o subproductos de la industria pesquera nacional, mientras que otros intentan aplicar un recorte del 30% en los salarios de los trabajadores que desarrollan sus tareas a bordo de las embarcaciones.
“Desde nuestra institución vemos con total preocupación estas iniciativas, dado que la primera solo favorecería al eslabón exportador de la cadena de valor pesquera, dejando de lado a aquellos armadores que realizan exclusivamente tareas extractivas. Además, generaría la primarización total de las exportaciones en la materia, eliminando el trabajo en las plantas de procesamiento del país y originando despidos masivos”, explicó el Capitán Mariano Moreno, Secretario General del Centro de Patrones.
Asimismo, el dirigente aseguró que “resulta inadmisible cualquier recorte al salario de los trabajadores del sector, ya que gracias a su esfuerzo y sacrificio se generan las capturas que permiten el desarrollo de la industria”.
La solución está, si el Gobierno cumple con su promesa de campaña
“Siempre se ajustan las mismas tuercas —la de los trabajadores— pero nadie le reclama al gobierno que bajen los impuestos como prometieron”, resaltó Moreno.
El gremio realizó un análisis pormenorizado sobre la incidencia del costo del combustible en la operatoria de las distintas flotas que componen la industria pesquera nacional, con el objetivo de proponer una solución económica sin perjudicar a los trabajadores.
Dicho informe arrojó datos concretos sobre el desarrollo de la actividad pesquera, detallando el consumo de combustible según el tipo de flota:
Flota Costera Marplatense (1 embarcación): 50 viajes al año, 175.000 litros de combustible promedio.
Flota Fresquera de Altura (1 embarcación): 40 viajes al año, 384.000 litros de combustible promedio.
Flota Fresquera de Altura (Grande, 1 embarcación): 20 mareas al año, 804.000 litros de combustible promedio.
Flota Tangonera Congeladora (1 embarcación): 10 viajes al año, 702.000 litros de combustible promedio.
Flota Congeladora de Merluza Negra (1 embarcación): 5 viajes al año, 3.145.000 litros de combustible promedio.
En 2023, el valor promedio del litro de combustible fue de $248, mientras que en 2024 subió a $1.000, lo que representa un incremento del 400%.
“El Gobierno Nacional, encabezado por Javier Milei, liberó los precios de los combustibles sin medir las consecuencias. Sin embargo, podría quitar los impuestos a los combustibles, lo que significaría un alivio para el sector pesquero, ya que los impuestos representan el 31% del precio del combustible”, detallaron desde el gremio.
Según el análisis del Centro de Patrones, si el Gobierno hubiera eliminado los impuestos al combustible:
Flota menor: Hubiera gastado $108.500.000 (USD 121.197,90) en vez de $175.000.000 (USD 195.480,49), generando un ahorro de $66.500.000 (USD 74.282,59) por embarcación.
Flota mayor: Hubiera gastado $1.949.900.000 (USD 2.178.099,48) en vez de $3.145.000.000 (USD 3.513.063,68), con un ahorro de $1.195.100.000 (USD 1.334.964,20).
“El valor del combustible es uno de los principales factores que afectan la rentabilidad y competitividad de nuestra industria. La carga impositiva encarece de manera significativa la operatividad de las embarcaciones, impactando no solo en los costos de producción, sino también en la sostenibilidad de las empresas y el empleo en el sector”, amplió Moreno.
Finalmente, el Capitán Moreno sostuvo que “el Gobierno Nacional debe hacerse cargo del impacto negativo de sus medidas de gestión, que han generado un incremento feroz en los costos de producción”, y que es indispensable que el Ejecutivo brinde soluciones tanto para los trabajadores como para las empresas del sector.