La directora del Hospital de Niños Víctor J. Vilela, Stella Binelli, se refirió al caso de la
beba bermudence de dos años y cuatro meses que ingresó ayer al nosocomio en estado crítico, con un evidente estado de abandono por parte de su familia.
"Creo que estamos ante un caso de abandono extremo. Un cuadro dejado a su libre evolución. Por suerte, y gracias a la intervención del equipo de salud que la recibió se logró compensarla porque llegó con riesgo inminente de vida, muy crítica", señaló Binelli en diálogo con radio LT8 de Rosario.
La directora del nosocomio explicó que la nena, que en primera instancia fue derivada al Hospital de Capitán Bermúdez y luego tuvo un paso por el de Granadero Baigorria, "ni siquiera pasó por la guardia. Se la derivó directamente a la sala de terapia intensiva porque presentaba un cuadro crítico, un shock séptico por una infección diseminada".
"Tenía úlceras en el hombro izquierdo y en la rodilla derecha. Eso ha generado, dejándolo evolucionar el proceso infeccioso, lesiones en toda el área de piel, músculos y dejar expuesto el hueso, con una seria lesión de osteomelisis subaguda o crónica", describió Binelli sobre Ludmila, la beba que vive en barrio Copello.
"La nena fue compensada y se comenzó en tratamiento por el proceso infeccioso. Por suerte no fue necesario colocarla en respiración mecánica, pero el proceso infeccioso era muy crítico. Ahora hay que esperar la evolución", agregó.
Por otra parte, según indicaron fuentes reservadas a este medio, un primero hermano de Ludmila, de 8 años, habría sido derivado en la mañana de este jueves a un Hospital de la localidad de Rosario para que se le realicen algunos estudios, ya que estaría bajo un grave cuadro de desnutrición infantil.