
No es ninguna novedad que la pandemia alteró nuestros hábitos alimenticios y estilos de vida durante los últimos 15 meses. Debido al impacto significativo del COVID-19 en el bienestar físico y mental de muchas personas, existe un creciente interés en comer alimentos que tengan propósitos relacionados con la salud.
Sweet Power es el nombre de la marca de suplementos innovadora -que en alianza con Tomorrow Foods, una startup de alimentos argentina- aspira a llegar al consumidor ofreciendo una línea de golosinas funcionales que no contienen azúcares agregados ni gluten. Con etiquetas limpias, estos caramelos serán de origen vegetal y con alto valor nutricional.
Según un informe de la ONU Argentina es el país con mayor prevalencia de malnutrición, donde casi 2 de cada 5 niños y niñas tienen desnutrición o malnutrición. Con el objetivo de brindar respuestas proteico-energéticas a esa población infantil, la startup argentina Tomorrow Foods, junto a un organismo público lograron crear el primer aislado proteico de arvejas de Latinoamérica. Y ahora están trabajando en este desarrollo de golosinas con etiquetas limpias.
Se espera que utilicen listas de ingredientes breves, comprensibles y evitando el uso de ingredientes controvertidos como colorantes, conservantes, sabores y tintes artificiales. De este modo, Sweet Power llegará al mercado como un producto dietario a base de proteína de arveja aislada que aportaría proteínas, vitaminas, minerales, carbohidratos y fibras que se necesita para brindar respuestas a la desnutrición o malnutrición que afecta a las infancias y que conlleva problemas a nivel cognitivo y de crecimiento.
Saludable, sostenible y equilibrado
Con los consumidores más interesados en la calidad nutricional de los productos que consumen, Tomorrow Foods está tomando notas de la industria de los suplementos, mediante la creación de golosinas con nutrientes agregados que pueden apoyar la función inmunológica y la salud en general, como probióticos, zinc, selenio, vitamina C y vitamina D.
“Lo bueno es que este producto no va a contener azúcar agregada y aportará toda la fibra que contiene una fruta. De esta manera, vamos a poder llegar a cualquier cantina de escuela como golosina saludable. Al mismo tiempo, planteamos la posibilidad de mover economías regionales como la zona de Coronda en la que tenemos plantaciones de frutillas. Podríamos ayudar a los productores, no trabajando con la frutilla en sí, sino con el descarte que ellos no suelen utilizar”, adelantó Cristaldo.
Leonardo Cristaldo es el emprendedor santotomesino que lidera este proyecto integrado por otras tres personas: Uriel Navarro, estudiante avanzado de Biotecnología (FBCB-UNL); Andres Burkett, especialista en Marketing (FCE-UNL) y Sandra Gympel, licenciada en Tecnología de los Alimentos (Conicet-UNL). Este equipo interdisciplinario se conformó en octubre del año pasado en el marco del programa UNL Potencia, un espacio destinado a preincubar startups regionales dependiente de la Universidad Nacional del Litoral (UNL).
“En esta participación, el proyecto obtuvo en mayo una mención especial en el concurso ‘IDEA–L TEAM, Mi primera start up’, organizado por la Universidad, a través de la Secretaría de Vinculación y Transferencia Tecnológica”, contó la coordinadora del programa UNLBio, Romina Joris y agregó: “El principal objetivo de esta iniciativa es conformar equipos emprendedores con diversos perfiles, para resolver demandas o problemas bio generando nuevos productos y tecnologías para el sector socio productivo”.