Con el armado de un gran frente opositor ya casi cocinado y con el certificado de defunción del Frente Progresista, Cívico y Social ya firmado, las elecciones 2023 en Santa Fe parecen acercarse cada vez más a un escenario de polarización entre dos espacios, cortando la tradición santafesina de las últimas contiendas electorales, en las que no se avizoraba un bipartidismo, sino una división en tercios.

Y si bien aun no está confirmado el calendario electoral, aunque se sabe que las elecciones generales serán en los primeros fines de semana de septiembre, la danza de nombres de posibles candidatos a gobernador, tanto en el espacio opositor como en el peronismo, ya tomó buen ritmo.

Dentro del Frente de Frentes que parece finalmente conformarán la UCR, el PRO, el Partido Socialista, el CREO que conduce Pablo Javkin y otros partidos como el PDP, la Coalición Cívica y UNO, espacio que aun no definido su nombre, hay algunas cartas que están sobre la mesa desde hace tiempo. Uno de los que hace mucho se puso el traje es el diputado provincial Maximiliano Pullaro. El ex ministro de Seguridad provincial de Miguel Lifschitz lidera el sector UCR Evolución y forjó una fuerte alianza con el espacio del PRO que tiene entre sus referencias al diputado nacional Gabriel Chumpitaz, uno de los que suene como posible candidato a intendente en Rosario.

Pero difícilmente Pullaro sea el único candidato radical dentro del espacio. La tribu del MAR (Movimiento de Acción Radical), que tiene como armador al diputado provincial Julián Galdeano, también apostará a tener su binomio de precandidatos a gobernador. Allí suenan, entre otros, dos de los tres senadores que posee la provincia en el Congreso de la Nación: Carolina Losada y Dionisio Scarpín. De igual manera, desde el sector ya señalaron que no descartan acuerdos con otros espacio, como por ejemplo con el intendente rosarino. Javkin aun no decidió si intentará una reelección al frente del Palacio Municipal más importante de la provincia o si pega el salto a la gobernación.

Mientras tanto, el Partido Socialista, que a priori era el espacio más reticente a sumarse a las filas del gran armado opositor, se muestra cada vez más adentro. Y reafirma el objetivo de tener candidaturas en todas las categorías. En el partido de la rosa aparecen los nombres del ex gobernador Antonio Bonfatti, la diputada provincial Clara García o de Mónica Fein, actual diputada nacional y exintendenta de Rosario. Todo dependerá de los acuerdos que se logren con alguna de las tribus del radicalismo.

Otro de los partidos que podrían sumarse en la gran interna del frente opositor es el PRO, a pesar de que aparece en principio aparece debilitado, principalmente luego de los comicios de 2021, que dejaron mejor posicionado al radicalismo provincial dentro de Juntos por el Cambio. El nombre de Federico Angelini es uno de los que primer suena a la hora de pensar en un candidato a gobernador amarillo en Santa Fe.

Perotti buscará ponerse la campaña al hombro

En el peronismo tampoco está definido el nombre que llevará el Frente que aglutine a los distintos candidatos que pujen en las primarias por poner al candidato a gobernador definitivo. Perotti ya expresó que "Frente de Todos" no va más. Habrá que ver si intenta despegarse nuevamente de la disputa electoral nacional, cuyos comicios serán un mes y medio después que los santafesinos, y juega nuevamente a provincializar la contienda.

Sin posibilidad de ser reelecto, el jefe de la Casa Gris analiza encabezar la lista de diputados provinciales, emulando la estrategia que utilizaron sus dos antecesores, tanto Lifschitz como Bonfatti, para retener poder y sostenerse en el plano provincial. Aunque también en las últimas horas surgieron versiones que lo ubican en un posible armado nacional de un peronismo "no kirchnerista" con un rol protagónico.

Desde hace tiempo Perotti intenta instalar al diputado nacional Roberto Mirabella como su sucesor, aunque parece que su coterráneo rafaelino no logra posicionarse definitivamente. También sonó la ministra de Gobierno, Celia Arena, pero el nivel de desconocimiento, fundamentalmente en el sur provincial, le juega en contra.

Pero uno de los nombres que aparece desde hace tiempo primero en la línea de largada, aunque nunca confirmó su participación, es el del senador nacional Marcelo Lewandowski. Es uno de los grandes electores que tuvo el peronismo en las últimas dos elecciones y, si bien supo ser muy cercano a Perotti, en el último tiempo tomó una distancia considerable de la gestión provincial. El periodista deportivo se debate entre bajar a la provincia para pelear por al gobernación, competir por la intendencia de Rosario, o la tranquilidad de su banca en el Senado de la Nación.

En otros campamentos peronistas hace meses que ya definieron jugar en la interna y tienen nombre puesto para la gobernación. El Movimiento Evita, por ejemplo, que intenta tejer alianzas con otros sectores de la centroizquierda, lanzó al diputado nacional Eduardo Toniolli. En La Cámpora aparece lanzado otro diputado nacional, Marcos Cleri, y el legislador provincial Leandro Busatto, del espacio que lidera Agustín Rossi, también se anotó en la carrera a la Casa Gris.

Un espacio para romper la polarización

A pesar de que las encuestas presenta un escenario bien polarizado en la provincia, a fines de 2022 se oficializó la construcción de un amplio armado de la centroizquierda, que intentará terciar en la disputa electoral de este año en Santa Fe.

Entre otros referentes, se sumaron al armado el diputado provincial Rubén Giustiniani (Igualdad), los diputados provinciales Carlos del Frade (Soberanía Popular) y Fabián Palo Oliver (Alfonsinista auténtico), la ex ministra de Educación Claudia Balagué (Bases-PS), el ex presidente de la Cámara de Diputados Eduardo Di Pollina (Bases) y el ex secretario de Promoción Social de Rosario Miguel Zamarini (Igualdad).