No se encontraron resultados.Las elecciones del pasado 27 de octubre provocaron un revés sin precedentes para el oficialismo de Capitán Bermúdez. El Frente Progresista Cívico y Social perderá, a partir del 10 de diciembre, la mayoría dentro del poder legislativo local, algo que hasta el momento lo había permitido hacer y deshacer a gusto y medida durante todos estos años.

En el nuevo esquema, el oficialismo contará con tres bancas (Vilma Paulini, Daniel Fernández y Hernán Fani); el justicialismo tendrá otras tres (Carlos Dolce, Daniel Cinalli y Fabiana Albornoz) y la restante quedará para Jorgelina Signa, representante del Partido Obrero (PO).

A pesar de las diferencias dentro del peronismo local, que quedaron evidenciadas en la contienda electoral más allá que el PJ fue el ganador de las elecciones, todo indica que los ediles del partido del general conformarán un solo bloque, aunque se trataría más de una cuestión funcional a la coyuntura que una verdadera unión. De todas maneras, algunas ya empezarán a pensar en 2015 y la lista única.

La primera discusión entre las partes girará en torno a la presidencia del cuerpo. El justicialismo puede reclamarla al tener la misma cantidad de integrantes dentro del Concejo que el Frente Progresista. Sin embargo, parece que los peronistas no se encuentran entusiasmados con la idea de ocupar ese lugar; les alcanza y les sobra, más si se tiene en cuenta que la edil del PO demostró ser una férrea opositora a esta gestión, con tener la mayoría a la hora de votar. Además, tanto la vicepresidencia primera como la segunda podrían quedar en manos de la oposición: la 1° para el PJ y la segunda para Signa. También sería un buen gesto dejar la máxima autoridad en manos del Frente.

Pero no sólo se trata de una modificación de nombres, caras y colores políticos, sino que también significará un cambio en el modo de trabajo. Las comisiones no serán todas presididas por ediles oficialistas y las sesiones no estarán supeditadas a las ganas o necesidades del partido de gobierno. Los concejales que acompañan a Mario Montizanti deberán abrirse al diálogo y consensuar para no tener grandes dolores de cabeza.

Todavía nada está definido y en política, si se quiere como en el fútbol, nada está dicho hasta último momento. Pero lo que queda claro, o en realidad quedó claro desde el 27 de octubre a la noche, es que a partir del próximo año habrá un nuevo Concejo en Capitán Bermúdez. Ojalá sea para el bien común de los vecinos.