No es la repitencia o no repitencia donde se debe poner el acento, sino en garantizar la formación de las y los alumnos para que cuando egresen del sistema puedan continuar en el nivel superior o ingresar al mundo laboral sin problemas. Con este proyecto, el gobierno de Omar Perotti busca ocultar el fracaso de la gestión educativa. No evaluar a los alumnos, es no conocer los resultados del aprendizaje, es faltarles el respeto, ignorarlos y excluirlos.

Lamentamos que otra vez la ministra haga anuncios superficiales, sin brindar la información necesaria sobre puntos importantes de esta iniciativa. Queremos saber por ejemplo, de qué manera los chicos que desaprueben materias van a aprobarlas. No es lo mismo que un alumno recurse el espacio, tal como se hace en la universidad, debiendo aprobar exámenes finales y parciales y acreditando asistencia, o que deba rendir un examen en condición de alumno libre; que plantear modos alternativos donde el alumno haga un trabajo integrador y sea acompañado por un tutor, como fue implementado durante la pandemia. Creemos que esta modalidad no garantiza el aprendizaje real de los alumnos”.

La solución no está en promocionar sin condiciones, ya que tarde o temprano esta especie de «estafa educativa» se pone en evidencia cuando los alumnos chocan contra la realidad laboral o universitaria que les demuestran que no están preparados. Cuando la ministra dice que las políticas implementadas le muestran una mejora en los indicadores educativos, y cita los números de matrícula de nivel secundaria afirmando un crecimientos sostenido en 2020 y 2021, omite que se indicó a las escuelas que no den de baja de los sistemas de gestión a los alumnos que abandonaron el sistema. Ese dato nos brinda un contexto de lectura fundamental de los números, del mismo modo que lo haría que nos cuente cuál es el universo de jóvenes en edad de cursar el nivel y los porcentajes que se encuentran dentro y fuera del sistema.

Reconocemos el problema que viene transitando el sistema educativo argentino y el de la provincia de Santa Fe, y creemos que el eje de la discusión debe estar puesto en fijar líneas de acción razonables para lograr recuperar saberes. El camino a menores índices de repitencia es el mismo que el que lleva a una mejor calidad educativa. Hay que dejar de pensar que el chico debe estar en la escuela como sea y hay que trabajar para que en las escuelas la prioridad vuelva a ser enseñar y aprender. En estos años se le han añadido a las escuelas muchas funciones, como la contención social, que han desdibujado su rol central. Evaluar es saber dónde estamos parados hoy el sistema educativo.

La problemática educativa actual es compleja y se encuentra afectada por la crisis socioeconómica actual, donde los chicos presentan una mayor fragilidad. La dedicación laboral de los docentes de secundaria, que deben trabajar en más de un establecimiento, es un tema a abordar, ya que la dispersión no los ayuda en su desempeño laboral. Muchos docentes nos manifiestan la necesidad de capacitación continua que les brinde herramientas para mejorar la didáctica de sus materias, y la falta de recursos o la deficiencia de mantenimiento de los edificios escolares. En vez de abordar todas estas cosas Cantero se centra en armar un relato que la deje mejor parada en su gestión, pareciera que poco importa cuánto aprenden o no las y los alumnos en las escuelas o que piensan las y los docentes sobre la mejor forma de enseñar y aprender saberes.

Silvana Di Stefano
Diputada provincial UCR
Licenciada en Comunicación Social
Docente de la Universidad Nacional de Rosario