Luego de los desmedidos aumentos de la Tasa General de Inmuebles (TGI) en el último tiempo y casi como un manotazo de ahogado tras el resultado electoral de las PASO, el intendente de Granadero Baigorria Adrián Maglia pidió perdón a los vecinos y envió al Concejo Municipal un proyecto para modificar la llamada Ordenanza General Impositiva, con el objetivo de devolverle al cuerpo legislativo la potestad de aplicar los aumentos sobre la tasa.

El anuncio de Maglia fue tomado como algo meramente electoral, ya que dio a conocer la medida a dos semanas de las elecciones generales en las que podría perder la Intendencia. Fue precisamente la suba desmedida de la TGI que dispuso el jefe municipal una de las medidas más antipopulares de su gestión, que generó movilizaciones de vecinos y hasta un intento de rebelión fiscal.

“Si me equivoque pido disculpas”, señaló Maglia al anunciar la decisión, y explicó: “explicó: “Nosotros teníamos la atribución, otorgada por el Concejo, para aplicar aumentos o cambios. Ahora lo que hice es enviar un proyecto de ordenanza para anular eso, específicamente la llamada cláusula gatillo. Si el Concejo aprueba esto será el propio cuerpo legislativo el que tenga la potestad, a partir de estudios o con el instrumento que considere, de aumentar la tasa”.

En cuanto al futuro tratamiento del tema, Maglia opinó que “el Concejo es un órgano equilibrado en materia política y tiene representantes de todo el pueblo, de distintos partidos políticos”. Debido a eso, “consideramos entonces que sean ellos los que aumenten la tasa cada vez que lo consideren”, planteó.

Maglia también sumó a las medidas electoralistas una disminución en el valor de la sobretasa por baldío. “Prevemos una gran reducción en los porcentajes de impuestos aplicados y mayor facilidad en la gestión del trámite”, dijo el mandatario.