Funcionarios del Ministerio de Seguridad de la provincia de Santa Fe tuvieron una extensa reunión con el intendente de la ciudad de San Lorenzo, Leonardo Raimundo, en donde se comprometieron a abordar las problemáticas en materia de inseguridad que aquejan a esta región.
“Negocios en pleno centro asaltados, kioscos, joyerías, una gomería, granjas que le entraron dos veces en una semana, robo de bicicletas, agresiones a chicos en el skatepark, presencia de personas con actitudes indebidas en plazas y paseos, robo a la propiedad pública. nos desvalijaron la oficina de empleo y el parador”, fueron algunos de los hechos que el intendente sanlorencino mencionó que ocurrieron en estos últimos días, y que fueron planteados hacia el secretario de Seguridad Pública, Jorge Bortolozzi, y el subsecretario de Prevención y Control, Claudio Brilloni.
“Yo le pedí al gobernador que nos de soluciones, cada vecino paga impuestos provinciales, y la cantidad de policías que hay en la ciudad es inadecuada. Seguro cada intendente dice lo mismo, pero en San Lorenzo, pese a que somos 50.000 habitantes, tenemos colegios, 18 sucursales bancarias, aduana, tribunales, eso no hay en todos los pueblos por eso vienen acá, que me parece fantástico pero eso necesita la duplicación de la cantidad de policías que tenemos. San Lorenzo de día tiene una circulación de 120.000 personas, con 7.000 camioneros por día, con gente de todos los pueblos, eso genera una oportunidad a la inseguridad”, graficó Raimundo este martes por la mañana en conferencia de prensa.
En concreto, la reunión que mantuvieron durante dos horas el intendente junto a los funcionarios provinciales concluyó en un borrador donde la Municipalidad solicitó la optimización del destacamento de barrio Bouchard y la vuelta del que estaba ubicado en barrio Norte, el retorno de los operativos de saturación, y una mayor cantidad de policías en las calles de la ciudad.
En ese sentido, Raimundo sostuvo que el fin de semana hubo una llamada con el gobernador Omar Perotti, de quien sostuvo que “entiende y acompaña el pedido y que las cosas se hagan”.
Para Jorge Bortolozzi, los pedidos de la ciudad son “comprensibles, razonables y racionales”.
“Nosotros decimos que debemos fortalecer más a la policía, que es la principal herramienta que tiene seguridad para combatir el delito. El vecino es el que está inseguro y el delincuente está tranquilo. Tenemos que cambiar eso”.
El funcionario recaló en dos ejes: el accionar de bandas narco criminales, fenómeno que aqueja fuertemente a la ciudad de Rosario, y aquí, según sus declaraciones, está en “un estado incipiente”. “Estamos a tiempo de reaccionar y prepararnos, para que no avance esta modalidad que incluye hechos de extorsión, balaceras, etc”.
El otro punto es de las denominadas “faltas”, de las cuales sostuvo que “hay que ocuparse”, ya que son “el primer peldaño, donde el niño o el joven comienza a estar en el mundo delictivo”.
“La Ley de Emergencia nos permitirá contar con mucho más recursos para adquirir tecnología e infraestructura, mejorar lo que tiene que ver con los sueldos de los policías y lograr que la fuerza tenga nuevamente el autoestima. Estos pedidos son viables y necesarios. El intendente nos planteó 60 días para ver cambios, y nosotros creemos que tiene que ser antes. No hay tiempo que perder”, concluyó.