El ministro de Gestión Pública de Santa Fe, Marcos Corach, fue el encargado fue el enviado del gobernador Omar Perotti al corte de la Autopista Rosario - Santa Fe que encabezaron taxistas de la ciudad de San Lorenzo, acompañados del propio intendente Leonardo Raimundo, tras el ataque a un joven el pasado viernes en el marco de un violento robo en barrio Capitán Bermúdez.

Corach firmó allí con el jefe municipal un compromiso para el envío de más efectivos y móviles policiales, algo que finalmente se concretó este lunes por la mañana. Sin embargo, el ministro no quedó conforme con la actitud de Raimundo y señaló que hubo una “sobreactuación” del intendente.

“El ambiente no era de lo más placentero y no puedo dejar de pensar en una sobreactuación”, declaró Corach en diálogo con Radio 2 sobre el momento que vivió el pasado sábado en plena autopista y señaló al propio jefe municipal de propiciar un clima hostil. “Los directos afectados (por el padre de Brenda, la víctima) no tenían el mismo sentimiento de enojo y resentimiento”.

El ministro de Perotti indicó que intentó generar calma, pero que le resultó difícil. Y añadió: “Yo ya tengo unos años en la política y tengo la capacidad de discernir y diferenciar cuándo es genuino y cuándo está armado”.

Además, confirmó que evalúa la posibilidad de denunciar al intendente por incurrir en un delito al cortar la conexión vial. “Lo estamos hablando con el fiscal de Estado Rubén Weder, claramente ha incurrido en un delito y vamos a ver qué actuación vamos a hacer”, dijo.