Un equipo de médicos del Sanatorio de Niños de Rosario llevó a cabo un trasplante hepático a un bebé prematuro de tan solo 23 días de edad. El pequeño, llamado Elián y oriundo de la ciudad de Santa Fe, nació con apenas 33 semanas de gestación y un peso de 1.900 gramos.


El trasplante fue necesario debido a una hepatitis aloinmune, una enfermedad poco frecuente en la que los anticuerpos maternos atacan las células hepáticas del bebé. Ante esta situación, el equipo médico liderado por el cirujano hepático Lisandro Bitetti decidió realizar una cirugía sin precedentes en la región, adaptando un fragmento de hígado del padre de Elián para adecuarlo al diminuto tamaño del bebé.


La operación, que duró más de 12 horas, implicó una hiperreducción del órgano donante para asegurar su funcionalidad en el cuerpo del pequeño. Según el Dr. Bitetti, "Este es un caso único en Latinoamérica y uno de los pocos registrados en el mundo. La complejidad de la cirugía requirió un esfuerzo conjunto de todo el sanatorio, desde los equipos quirúrgicos hasta la administración y el personal de limpieza".


Tras siete meses de cuidados intensivos, Elián recibió el alta médica y ahora continuará con controles y seguimiento para garantizar su salud a largo plazo.