Mujeres en Obra, una cooperativa de mujeres que trabaja en la construcción en el Cordón Industrial
Mujeres en Obra, es una cooperativa de mujeres que surgió en San Lorenzo y se extiende a lo largo del Cordón industrial. Trabajan en la construcción y brindan capacitaciones a otras mujeres. Buscan la inclusión laboral con perspectiva de género.
Mujeres e Obra es un proyecto que comenzó a madurar en plena pandemia y hoy se convirtió en una empresa cooperativa de mujeres que busca generar trabajo de calidad con perspectiva de género en la construcción mediante capacitaciones y formando equipos de trabajo. Su filosofía se enfoca en el triple impacto: social, sustentable y rentable.
Alejandra Cabeza, Georgina Arnhold, Analía Mandirola y María Milagros Clericci son quienes representan el proyecto, pero en cada obra hay más de 20 mujeres que trabajan mancomunadamente por y para el proyecto.
Esta cooperativa que hoy se dedica a brindar servicios en el rubro de la construcción comenzó como un proyecto y terminó convirtiéndose en una empresa cooperativa que forma y capacita mujeres, además de formar equipos de trabajo, en Rosario y todo el Cordón Industrial, y busca la igualdad y perspectiva de género en el rubro de la construcción.
"Capacitamos para trabajar en obra. A su vez, nosotras también nos formamos para trabajar en obra, generando trabajo de calidad con mucha formación profesional y buscando innovar también en materialidad y en tecnologías aplicadas”
“Decidimos junto con Georgina darle solución a una cuestión de demanda social, porque la pandemia creo que dejó en evidencia justamente el lugar que las mujeres ocupaban como centro de organización del hogar, y por otro lado, también otras razones justamente económicas, dijimos ¿Por qué no? Poder encontrar acá la posibilidad de dar una respuesta económicamente viable y prestar un servicio. Así fue como decidimos ponerle acción y empezamos a pensar nuestra primera capacitación de formación. La pudimos dar en septiembre del 2021. Conformamos nuestro primer equipo, y de ahí empezamos y no frenamos más, y nos pusimos como objetivo generar trabajo de calidad con perspectiva de género en el rubro de la construcción”, expresó Alejandra Cabezas, en diálogo con 11Noticias.
“El objetivo principal de mujeres en obra en nuestra formación es generar capacitaciones no solo por el hecho de aprender, sino poder ir al otro punto, creo que es el complejo y el crítico, y es transformar en una posibilidad concreta de trabajo y por eso conformamos equipos de trabajo. Capacitamos para trabajar en obra. A su vez, nosotras también nos formamos para trabajar en obra, generando trabajo de calidad con mucha formación profesional y buscando innovar también en materialidad y en tecnologías aplicadas”, agregó Alejandra.
La filosofía del “Triple impacto”: social, sustentable y económico
La cooperativa se rige bajo la filosofía del triple impacto: social, sustentable y económico que explica una metodología de trabajo basada en poder generar un impacto social que genere un aporte en la sociedad, “en este caso, la opción de, que sea con perspectiva de género de la mujer en el rubro”, la incorporación de materiales sustentables, “o materiales o sistemas constructivos sustentables que hagan al aprovechamiento de las materialidades, al aprovechar de nuestro tiempo, al aprovechamiento de nuestro esfuerzo físico, o sea, poder implementar las herramientas que haga que sea todo más fácil”, explica Georgina. Y por último el impacto económico, para que sea rentable para todos.
“Eso es la mirada de triple impacto que son lineamientos que nos llevan adelante cuando nos vamos del eje, puede ser que surgen ideas y se van de esas tres líneas y ahí es cuando nos nos devuelve al eje”, agregó Georgina.
Perspectiva de género e inclusión laboral
La perspectiva de género en el rubro de la construcción implica pensar en modos de organización y ejecución que tengan en cuenta las problemáticas inherentes a la condición de mujeres, como la maternidad y las responsabilidades en el hogar. Desde Mujeres en Obra garantizan el acceso a capacitaciones y piensan en espacios de cuidado y recreación para las infancias.
“Pensar en una empresa, en una organización con perspectiva de género, no significa solamente incorporar mujeres y diversidades a los planteles. Significa pensar modos de organización o de ejecución, en este caso, de los trabajos, que tengan en cuenta aquellas problemáticas inherentes o situaciones inherentes a nuestra condición de mujeres”, explica Alejandra.