“Necesito un préstamo”, fue la frase con la que irrumpió el jubilado, generando una carcajada en Valentina, la joven empleada del lugar, quien creyó que se trataba de una broma. Sin embargo, la situación cambió de inmediato: el hombre mostró un arma y le advirtió con seriedad, “Esto es un robo”.

“Dame la plata, la necesito”, le dijo mientras sostenía el arma, según relató la víctima. Tras el sorpresivo intercambio, el hombre logró llevarse $200.000 en efectivo y escapó rápidamente. Toda la secuencia quedó registrada por las cámaras de seguridad del local, que ya están en manos de la policía.

El hecho generó conmoción entre los vecinos, no solo por el robo en sí, sino por la particularidad de que el autor sería una persona mayor. La policía trabaja en la identificación del sospechoso, y analiza si el arma utilizada era real o una réplica.