Se trata de Marcelo Alejandro Gómez de 50 años de edad quien fue condenado como autor de "abuso sexual con acceso carnal agravado por el uso de arma; abuso sexual con acceso carnal simple; y lesiones leves dolosas agravadas", porque había mantenido relaciones de pareja con las víctimas.
La decisión fue unánime por parte del tribunal, que era integrado por los jueces Sergio Carraro, Octavio Silva y Lisandro Aguirre, quienes llevaron a cabo el juicio oral en los tribunales de San Jorge, en Santa Fe.
A su vez, el policía cometió delitos en contexto de violencia de género en perjuicio de las dos víctimas, ambas sometidas entre los meses de marzo y agosto de 2018, atacandolas en reiteradas oportunidades mediante golpizas y empujones. Además, a una de las mujeres le hizo un corte con un cuchillo y la quemó con un cigarrillo.
Los fiscales Rosana Marcolín y Omar De Pedro, quienes representaron al Ministerio Público de la Acusación (MPA), expresaron que "además de llevar a cabo conductas ajustadas a patrones patriarcales y subordinar a las víctimas por el solo hecho de ser mujeres, el condenado se aprovechó de su condición de policía jerarquizado y autoridad con carácter intimidatorio”.
En ese sentido, añadieron que “para evitar que lo denunciaran, les aseguraba a sus exparejas que su empleo le otorgaba impunidad”. Asimismo, se estableció que el imputado utilizó su arma de fuego reglamentaria para evitar que una de las víctimas opusiera resistencia a agresiones sexuales, así como para amedrentar a la otra.
En ambos casos se tomó como agravante que los delitos fueron cometidos por un hombre en contra de una mujer mediando "violencia de género", y la condena incluyó los cargos de amenazas calificadas por el uso de arma.