Un jefe narco, identificado como René Ungaro, fue acusado de ordenar desde la prisión una serie de homicidios en la ciudad de Rosario. Según la investigación, Ungaro ofreció pagar 30.000 pesos por cada muerte con el objetivo de "infundir miedo".

Los fiscales a cargo del caso, Patricio Saldutti y Franco Carbone, sostienen que Ungaro, quien se encuentra detenido en una prisión federal, se comunicó con uno de sus secuaces en la cárcel provincial de Coronda para dar instrucciones sobre la comisión de los asesinatos. Estos ataques al azar ocurrieron en julio de 2022 y resultaron en el fallecimiento de Claudia Deldebbio y su hija Virginia Ferreyra, quienes esperaban un autobús en una parada en Rosario.

El objetivo de estos actos no estaba directamente relacionado con las víctimas, sino que se llevó a cabo para generar temor en la ciudad y en otros grupos delictivos en el área. La jueza del caso ordenó la prisión preventiva para los cuatro detenidos involucrados, incluyendo a René Ungaro y Nicolás Martínez, quien ejecutó las órdenes desde la cárcel provincial.