La Justicia sanlorencina dispuso la prisión preventiva efectiva por el plazo de ley para un hombre de 43 años de Barrio Norte de San Lorenzo, acusado de abusar sexualmente de sus tres hijastras de 8, 11 y 15 años, en el domicilio en el que convivían junto con la mamá de las menores.

El pasado viernes 30 de septiembre, el Fiscal Aquiles Balbis le atribuyó los delitos de Abuso sexual con acceso carnal agravado por ser la victima menor de 18 años aprovechando la relación de convivencia con las menores de edad, como consumado y en carácter de autor, todo en concurso real y abuso sexual simple agravado por ser la victima menor de 18 anos aprovechando la relación de convivencia con las menores de edad. Por su parte, el Juez Dr. Romanini dispuso la prisión preventiva efectiva por el plazo de ley.

La mamá de las niñas contó en Canal 3 que se enteró de los abusos el martes 27 por la noche. “Mis hijas se juntaron las tres en su pieza, fui a ver qué había pasado porque una de ellas había salido de la habitación matrimonial y pegó un portazo. Les pregunté si podía pasar y me dijeron que no, pero como me resultó raro entré igual”.

“Estaban llorando, les pregunté qué pasaba y me contaron sobre el abuso de las tres por parte del hombre que hasta ese momento era mi pareja”, continuó. Y agregó que “cuando me contaron él estaba en la casa, así que saqué a las nenas y me las llevé de mi hermana”.

Luego, dijo que “lo enfrentó” y “cuando le dije lo que había hecho me decía que no podía ser, que era una brujería. Pero después me dijo ‘hacé lo que tengas que hacer’. Yo le dije que sí, que obviamente como mamá iba a hacer lo que tenía que hacer. Me preguntó qué hacía él y le dije que se quedara en la casa, fui a la Comisaría, hice la denuncia y lo vinieron a buscar enseguida. No se resistió”.

Según detalló, “primero empezó con mi nena mayor, pero ella no contó nada porque tenía miedo, obviamente porque estaba manipulada por él. Y como pasó un tiempo en el que él la dejó de tocar, pensó que no lo iba a hacer más. Pero en realidad no tocaba más a la más grande porque ya estaba tocando a las otras dos”.

Consultada acerca de cómo había sido con ella durante este tiempo, dijo “parecía una buena persona, nunca me levantó la mano, para todo era un hombre bueno. Ahora espero que se haga justicia, que no pise más la calle y que no vea más a una criatura”.