Una comerciante de Capitán Bermúdez se encontró en la mañana de este miércoles cuando fue a abrir su kiosco, con que delincuentes habían ingresado en horas de la madrugada y le habían robado mercadería y herramientas de trabajo por una suma aproximada de 100 mil pesos. Lo llamativo es que la mujer, que vive detrás del negocio, en ningún momento escuchó ruidos que le hicieran sospechar lo que estaba ocurriendo.

El registro de las cámaras de seguridad del local indica que cerca de las 12:30 de la noche, al menos tres delincuentes comenzaron lentamente forzar una ventana lateral del comercio, ubicado en calle Entre Ríos al 500, frente a la Avenida San Lorenzo, predio del ferrocarril de por medio, y no emitieron un solo ruido.

“Estuvieron toda la noche trabajando, hicieron un trabajo de hormiga. En una parte del video se ve que se pararon los tres tipos arriba de la reja para forzarla y hacer el menor ruido posible. Mi cámara tiene sonido y cuando ellos reventaron la reja no se escucha nada. Tampoco rompieron el vidrio, para no hacer ruido”, comentó a 11Noticias Cristina, la propietaria del kiosco .

Luego, para ingresar, quitaron una hoja de la ventana de su corredera y de esta manera consiguieron ganarse el interior del comercio. “Yo vivo acá y me levanté varias veces, pero no escuché nada. Solamente ruidos normales de los autos que pasaban por la calle”, añadió la mujer.

Además, contó que, de los tres solo ingresó uno mientras que otro se quedó en el frente del comercio “de campana” y el otro estaba al costado de la ventana, del lado de afuera.

Cristina detalló que “se llevaron cuatro cartones de 20 cigarrillos (cada uno), una balanza que sale 47 mil pesos y la había comprado hace seis meses, bebidas alcohólicas, chocolates, tarjetas sube, encendedores, bijouterie y algo de plata de la caja que había dejado para arrancar el día. Alrededor de 100 mil pesos entre todo lo que se llevaron”. Y sumó que, “se llevaron la pava eléctrica y dejaron la base”, por lo que no van a poder utilizarla.

En medio de la bronca y la indignación, la comerciante reflexionó que “estoy a un paso de un banco, es un lugar sumamente expuesto y visible. Estamos en pleno centro, a un paso de la avenida donde pasa el colectivo, a dos cuadras del Correo, de la Municipalidad, de la Comisaría. No hay nadie que no me vea y no conozca el negocio. Nos están robando como nada, ya nadie está seguro en ninguna parte de la ciudad”.

Cabe destacar que, cerca de las 3:30, se pudo ver a través de las cámaras de seguridad de la cuadra que pasó un patrullero por el lugar, pero al parecer, los efectivos policiales no advirtieron lo que estaba sucediendo en el kiosco.

Es dable mencionar también que, hace poco más de dos meses, a menos de 100 metros de este lugar, le robaron el auto a una reconocida abogada de Capitán Bermúdez tras encañonarla a ella y a su hija, cerca de las 20 horas del 19 de agosto.