En la tarde de ayer martes, detuvieron a José Mauricio Maturano, el segundo acusado por el crimen del chofer de la línea K, Marcos Daloia, ocurrido en el marco de una serie de atentados narcos ocurridos en el mes de marzo en Rosario.
Maturano fue atrapado por la Policía de la Ciudad de Buenos Aires cuando comercializaba estupefacientes en la Villa 31. Según consignó Infobae el hombre fue atrapado con envoltorios de cocaína y habría brindado una identidad falsa, pero minutos después se corroboró que se trataría del hombre que era buscado por la Justicia santafesina y por quien el gobierno había dispuesto una recompensa de 10 millones de pesos por información que sirviera para su captura.
El arresto ocurrió alrededor de las 3 de este martes en Aymará 890, del Barrio 31, cuando los policías descubrieron a Maturano con 68 envoltorios de cocaína, $8440 y 1 riñonera. Cuando cotejaron los datos con el sistema por orden de la Fiscalía Flagrancia Este, a cargo de Federico Tropea y el auxiliar fiscal Mariano Camblong, que encomendó la identificación fehaciente a esa área de la Policía de la Ciudad; ahí saltó que no era quién decía y que tenía pedido de captura activo.
Desde la Fiscalía Regional 2 de Rosario, indicaron que en los próximos días se realizará el traslado del acusado a la ciudad de Rosario para ser llevado a audiencia imputativa por homicidio, bajo la intervención del Fiscal Patricio Saldutti de la Unidad de Homicidios Dolosos.
Cabe recordar que en la causa por el crimen de Daloia, fue imputado el 1 de agosto pasado Axel Ignacio Herrera, un sospechoso de 19 años que está sindicado de haber sido el autor de los disparos mortales. De acuerdo a la teoría del caso, fue trasladado en una Honda Twister hasta Mendoza y Guatemala, en la zona noroeste de Rosario, de la cual se bajó para ascender al colectivo como falso pasajero.
Una vez arriba de la línea K, Herrera le dio dos tiros a Daloia, bajó de la unidad en Mendoza y México y volvió a subirse a la moto que lo esperaba a los pocos metros y que conducía Maturano.
Al presunto sicario lo entregó su familia al ver en los medios de comunicación un video que difundió el Ministerio Público de la Acusación con imágenes de los dos sospechosos de haber matado al colectivero.
Luego, en octubre pasado y a través de un juicio abreviado, Jesús Chávez y Marcelo Caro aceptaron penas de 3 años de prisión condicional por encubrimiento: escondieron la moto que manejaba Maturano. Además, en el domicilio en el que fueron arrestados también se incautaron las prendas que utilizaron los gatilleros para el crimen del colectivero.
Con información de Infobae y Fiscalía