Dos empleados de la Sucursal San Lorenzo de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) fueron separados meses atrás de sus funciones por maniobras fraudulentas, que salpicarían también a las autoridades políticas de la Municipalidad de Puerto General San Martín.
Por el caso, desde la empresa se hizo una denuncia ante el Ministerio Público de la Acusación y a, su vez, se abrió una investigación interna. Por el momento, se mantiene el secreto de sumario y se desconocen detalles del proceso de manera pública, aunque según pudo saber este medio se investigan conexiones clandestinas ordenadas por el municipio en un fideicomiso.
Uno de los empleados desleales (D.B.) ocupó un cargo jerárquico en la sucursal regional de la EPE y, en simultáneo, supo tejer estrechas vinculaciones con el intendente de Puerto General San Martín, Carlos De Grandis. Además, forma parte de una empresa privada que ejecutó obras y venta de insumos al propio municipio.
La relación con De Grandis se tejió a través del encargado del área de electricidad, parques y paseos Oscar Anselmi, un amigo del jefe municipal que tiene parentesco con el empleado investigado. Hasta el día de hoy comparten reuniones en bares de la región, cómo el 15 de abril en el café Havanna del Shopping Paseo del Bosque en Rosario y algunas comidas pre electorales con familias de la ciudad. Además, hay sospechas de que material faltante en los depósitos de la empresa de energía podría haber sido utilizado en obras públicas en Puerto General San Martín.
Según explicaron, la nueva jefatura de San Lorenzo empezó a revisar distintos expedientes y a controlar distintas factibilidades. En esa revisión detectaron el caso de un edificio nuevo con inconsistencias en el expediente. Luego, personal de la empresa se hizo presente en el lugar y constató que la obra que debía hacer el desarrollador en la vía pública, estaba hecha con cables de la EPE.
Desde la EPE no aclararon si la separación de estos trabajadores se vincula al caso de San Lorenzo u otras actividades incompatibles que desarrollaban estos empleados.
Más irregularidades en Puerto San Martín
Por otro lado, también se puso el ojo en la operatividad de la Carrusel Gigante que inauguró tiempo atrás la Municipalidad, con presuntas irregularidades en la conexión y un consumo excesivo que en varias ocasiones generó inconvenientes en el suministro eléctrico de la localidad, afectando principalmente al barrio Tierra de Sueños.
Además, el polo educativo aparecía como conexión de obra y no acusaba consumo. El municipio firmó con la Universidad Nacional de Rosario un convenio en el que se hacía cargo de todos los servicios y hasta el momento no pagó un peso. En pocos meses vence este acuerdo que tiene una duración de 5 años.