El éxito en televisión que significa para la señal Telefé cada noche en donde se emite Gran Hermano fue un llamado de atención para la televisión argentina, que en la ardua tarea de seguir subsistiendo como producto busca algún tipo de indicios para atraer a un público que aún sigue consumiendo la pantalla chica, al menos con cierta regularidad.

El Mundial terminó y los telespectadores quedaron ahí, y fue el reality de la casa el que más se llevó esa audiencia, promediando entre 20 y 25 puntos de rating noche tras noche, con mayores picos en las galas de eliminación de los días domingo.

No es casualidad que ese éxito para los tiempos que corren haya significado que el mismo canal lanzará una nueva edición de Masterchef, pero esta vez en su versión “abierta”, es decir, sin famosos.

También se anunció la vuelta de otro viejo reality que supo brillar en la televisión argentina: Expedición Robinson tendrá una nueva oportunidad y volverá a la grilla este 2023.

Uno de los primeros formatos reality que llegó al país tendrá una nueva edición, esta vez conducido por Marley (en las primeras ediciones el conductor fue Julián Weich) aún no tiene fecha de estreno pero sí tiene la confirmación de que se emitirá en televisión.

En ese sentido, el otro peso pesado de la televisión nacional, Canal 13, aún no anunció grandes cambios en su programación y continuará apostando a sus grandes y antiguas figuras (Mirtha Legrand tendrá una nueva temporada, carta fija teniendo en cuenta el año político que se viene).

Las grandes audiencias no son tan grandes como en el esplendor de años anteriores en la televisión, pero en un público versátil que aún sigue en pie, las apuestas del pasado parecen tener una ficha en el presente e intentarán escribir el futuro, al menos a corto plazo, de la pantalla chica argentina.