La ex jugadora de tenis francesa Angélique Cauchy estremeció a todo el mundo al recordar el calvario que vivió cuando era pequeña. El relato fue ante una comisión especial del Parlamento Francés y expresó que su entrenador la violaba “tres veces por día” viviendo alrededor de 400 violaciones durante casi dos años.

Se trata de Andrew Gueddes que el 13 de enero de 2021 fue condenado a 18 años de prisión por haber abusado de cuatro de sus alumnas cuando tenían entre 12 y 17 años, una de ellas era Angélique.

Además, denunció que "en el mundo del tenis se sabía que su comportamiento con las chicas jóvenes no era el correcto", y que cuando una mujer se quejó al presidente del club la respuesta fue "sí, pero él nos trae títulos".

"Me violaba tres veces al día"

El testimonio de la tenista Angélique Cauchy contra su entrenador que ha sacudido a Francia https://t.co/44Xh9n0A3j pic.twitter.com/XBPHLfqOQ1

— elDiario.es (@eldiarioes) September 13, 2023

Geddes es uno más que forma parte de la cultura que tolera abusos y defiende al poder. No es el primer caso que se conoce, el estadounidense Larry Nassar fue condenado a prisión perpetua por abusar a más de cien gimnastas. De hecho, la lentitud del FBI en la investigación le permitió a Nassar abusar de otras 70 atletas, hasta su detención.

En 2022, Diego Guacci habia sido denunciado por acoso sexual y violencia verbal y psicológica por cinco jugadoras por situaciones que vivieron cuando eran adolescentes. A una de ellas les dijo "¿Podés sacarte la camisa y mostrarme las tetas?", pero la FIFA decidió que esto no era suficiente para sancionarlo y lo absolvió.

En 2021, Francia celebró su primera convención sobre la violencia en el deporte, los casos datan de hace más de 20 años pero el 73% de ellas se refieren a casos cometidos en la última década. Del total, 107 han tenido lugar hace muy poco tiempo, en la temporada 2020-2021, según un análisis hecho por Le Parisien. En cuanto a las víctimas, el 70% son mujeres y el 84% eran menores de edad en el momento del incidente. 188 de las víctimas ni siquiera habían cumplido 15 años en el momento de la agresión.

Los abusos y la violencia existen porque vivimos en una sociedad que lo permite y un sistema judicial que los minimiza, pero cada vez son más los casos que salen a la luz para dejar atrás el silencio y la oscuridad.

“Es normal” le decía él, pero Angelique entendió que ya no hay ningún tipo de margen para la naturalización de estos casos. El mundo le está fallando a las mujeres, la igualdad de género no es sólo un objetivo, es una necesidad y el fundamento mismo de una sociedad más justa.