No se encontraron resultados.La marcha de los trabajadores en pos de defender su trabajo, dignidad y el sostén de su familia es la lucha más importante dentro de los reclamos gremiales. Sin dignidad no hay objetivos, no hay proyección de felicidad. El trabajo es plenamente el acto reflejo por naturaleza del hombre que acompañado de la sabiduría que este obtiene logra estabilizar un sistema económico personal y social.
El trabajador es el motor y el engranaje de la actividad económica de un país, pero también es el sujeto que cierra el círculo comercial de cualquier actividad. Sin la intervención del trabajador como actor principal de la economía tanto en la producción como en la demanda, la rentabilidad del comercio no existiría.
El trabajo es la forma más noble de formar a un sujeto común en un eslabón de la cadena principal del aparato socio-económico. El trabajo a lo largo y ancho del tiempo ha sido la herramienta de sometimiento por los grandes capitales, la herramienta de castigo por la clase política y la cuerda más fina de un sistema económico neoliberalista.
Las organizaciones sindicales formadas por la propia injusticia a la clase trabajadora y casi liquidada por el poder político y militar de los 70’ y 90’, hoy vuelven a ser seducida por el gobierno y presionada por el grupo empresario dominante del país.
Hay que dejar los miedos a la independencia, buscar la libertad de la palabra y luchar por las reivindicaciones laborales en cada rincón de nuestro país. El trabajo es el orgullo de cada sujeto que sostiene una familia y/o forja su futuro.
"Nosotros tenemos que defender nuestra revolución, la que estamos haciendo todos los días; y para poder defenderla hay que ir haciéndola, construyéndola, fortificándola, unir al trabajador con la conciencia de la importancia que tiene el acto creativo que realiza día a día; hacer del trabajo algo creador, algo nuevo..." Ernesto “Che” Guevara.