Este miércoles, a las 12, el presidente Javier Milei arribará a Córdoba para visitar las áreas más afectadas por los incendios forestales que ya llevan casi una semana sin control en la provincia. Milei estará acompañado por la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, y el jefe de Gabinete, Guillermo Francos. La visita busca evaluar de cerca la situación y coordinar acciones junto al gobierno provincial, que está liderando los esfuerzos para contener el fuego.
Los incendios en Córdoba devastaron más de 23 mil hectáreas hasta el momento, y la situación se volvió crítica en la región de Punilla, que fue declarada “zona de desastre”. Aunque los equipos de emergencia locales están trabajando intensamente, la magnitud de los focos activos obligó a que la Nación refuerce los esfuerzos, enviando recursos adicionales para combatir el fuego.
En una conferencia de prensa el martes, el vocero presidencial Manuel Adorni agradeció al gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, por el trabajo conjunto entre la Nación y la provincia. "Queremos agradecer al gobernador por el esfuerzo que estamos realizando de manera conjunta para mitigar la situación", señaló Adorni.
Por su parte, Guillermo Francos informó a través de sus redes sociales que el Servicio Nacional de Manejo del Fuego ya ha desplegado tres aviones hidrantes, dos helicópteros y más de 40 brigadistas para apoyar en las zonas más críticas desde la semana pasada. "Estamos comprometidos con el pueblo cordobés y seguiremos enviando todos los recursos que sean necesarios para enfrentar esta catástrofe", sostuvo el jefe de Gabinete.
Las condiciones climáticas adversas, como la sequía, los fuertes vientos y la falta de lluvias, dificultaron las tareas de control. En una comunicación con el Presidente, Llaryora indicó que, a pesar de los esfuerzos, el fuego continúa avanzando. “La evolución depende en gran medida de factores climáticos, pero estamos haciendo todo lo posible por contener la situación", afirmó el gobernador.
La respuesta de los vecinos de las zonas afectadas no se hizo esperar. Durante el fin de semana, numerosos residentes reclamaron la declaración de emergencia nacional, buscando que se destinen más fondos para la recuperación de las áreas afectadas y las viviendas dañadas por el fuego. Tras la declaración de “zona de desastre”, se habilitó el uso de recursos provinciales, y el gobierno de Córdoba solicitó a la Justicia ser querellante en la causa para investigar las causas del siniestro.
En lo que va del año, Córdoba vio cómo más de 40 mil hectáreas fueron consumidas por incendios forestales, una tragedia que sigue golpeando duramente a la provincia.