Ocurrió el viernes por la tarde en el Centro de Salud CAPS “Las Malvinas”, en la localidad de Gobernador Costa, partido de Florencio Varela. Un enfermero le aplicó a un bebé de 4 meses la segunda dosis de Neumococo, Poliomielitis, Quíntuple pentavalente y Rotavirus, pero cuando la madre y el niño llegaron a la casa descubrieron que le habían dejado la aguja clavada dentro de la pierna.

“Fui a la salita a las 13:30, le pusieron las cuatro vacunas inyectables y una oral. Cuando llegué a casa, mi bebé no dejaba de llorar. Pensé que era por las vacunas, pero no paraba. A las 15:30 le quité la cinta y vi que el enfermero le había dejado la aguja dentro de la pierna. No lo podía creer”, contó Karen, la madre del niño.

“Cuando fui a reclamar, el enfermero ya no estaba. Me atendió otro trabajador, quien me explicó cómo debía ser el protocolo y me dijo que las agujas son estériles y tienen fecha de vencimiento. También me pidieron que deje una queja en un libro. Ni ellos podían creer lo que había pasado. Dejé mi queja, pero no me quedé tranquila y llamé a la policía”, explicó.

El Gobierno de Florencio Varela decidió iniciar un sumario administrativo para investigar la actuación del enfermero involucrado. Según informaron fuentes oficiales, se tomaron las primeras medidas para separarlo del cargo mientras avanza la investigación.