Durante la procesión de la Virgen del Valle en Catamarca, una réplica de la virgen causó controversia por tener bordado en su manto una imagen del presidente Javier Milei abrazando al Papa Francisco.

La presidenta del PJ local y senadora nacional Lucía Corpacci expresó su descontento en redes sociales, criticando la mezcla de política y religión en el evento. Otros políticos opositores también se sumaron a las críticas, señalando que la bendición del manto con tintes políticos estaba fuera de lugar.

Desde el Obispado de Catamarca se explicó que la iniciativa del bordado fue de un grupo de mujeres dedicadas al bordado de mantos, como un gesto de apoyo al presidente Milei. Se argumentó que el diseño e idea fueron de tres sacerdotes y que la imagen réplica fue donada al secretario de Culto de la Nación, Francisco Sánchez, para entregársela al presidente.

A pesar de la explicación, la polémica continuó, destacando la separación de los intereses de la Iglesia y el Estado, así como la importancia de no mezclar la fe con posicionamientos políticos.

Las responsables de la confección del vestido y el manto de la Virgen afirmaron que el bordado con la imagen de Milei y el Papa era para recordar que el Santo Pastor está orando por el presidente y por la nación.