En un encuentro a puertas cerradas en la Universidad Salesiana, el Papa Francisco abordó la delicada cuestión de la homosexualidad dentro de la Iglesia, entre otros temas. Según fuentes presentes en el evento, el Papa expresó que "en el Vaticano hay aire de homosexualidad" y reconoció la dificultad de gestionar esta situación. Además, reiteró que, en su opinión, si un joven tiene una tendencia homosexual, es preferible que no ingrese al seminario, describiéndolos como "buenos chicos" pero que con esa tendencia es mejor que no. El Pontífice también subrayó la necesidad de estar atentos a las "ideologías" y manifestó que los tradicionalistas "no van bien" en el discernimiento de las vocaciones.
El tema de la homosexualidad, que el Papa ya había tocado en un encuentro anterior con los obispos italianos, sigue generando debate. Francisco mostró aperturas hacia las personas homosexuales en varias ocasiones, pero se manifestó claramente en contra de las "lobbies" dentro de la Iglesia. Además, el Papa criticó a aquellos religiosos que buscan hacer negocios, destacando que los bienes deben ser para la comunidad y no para la especulación, especialmente en el contexto del próximo Jubileo.
Durante el encuentro, Francisco abordó también la "mundanidad" que afecta a algunos obispos, que pierden su sentido pastoral y se convierten en funcionarios. En referencia a la baja participación en las últimas elecciones, el Papa destacó la necesidad de una "pastoral social" activa por parte de la Iglesia. Además, expresó su preocupación sobre cómo se invierte en armas mientras se descuidan aspectos fundamentales de la vida y la paz.
El Papa respondió a una pregunta sobre los padrinos en la Iglesia, indicando que los pecados de la carne no son más graves que los de la caridad. En cuanto a la sugerencia de abrir una puerta santa en un hospital durante el Jubileo, Francisco consideró la idea como buena y prometió reflexionar sobre ella.
El encuentro concluyó con el Papa mencionando que, como cada noche, llamaría a la parroquia de Gaza, y recordó la presencia de los embajadores de Israel y Palestina en un evento reciente en los Jardines Vaticanos para rezar por la paz.