El secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA), Daniel Succi, fue categórico al referirse a la grave situación que atraviesan los trabajadores de Vicentin, luego de que la empresa anunciara que no podrá afrontar el pago de los salarios. “La Justicia jugó y jugaron todos con Vicentin, pero nadie pensó en los trabajadores”, sostuvo el dirigente sindical.

En declaraciones realizadas este lunes, Succi afirmó que el anuncio de la empresa “es prácticamente una declaración de quiebra” y vinculó la crisis con el escándalo judicial que involucra a la firma. “Esto es un rebote de haber metido presos a los cuatro directivos responsables de este multimillonario robo. Hoy, con pruebas, podemos decir que lo de Vicentin fue un robo”, sentenció.

El gremialista recordó que el sindicato ya había advertido sobre la situación en septiembre del año pasado, cuando terminó la intervención y los directivos de la empresa retomaron el control. “Desde ese momento se robaron la plata de los sueldos. Nadie nos escuchó cuando denunciamos el faltante de dinero que debía destinarse al pago de energía, servicios y salarios”, apuntó.

Además, Succi reveló que la semana pasada mantuvieron una reunión con el juez en lo Civil y Comercial N°2 de Reconquista, Dr. Fabián Lorenzini, en la que solicitaron herramientas judiciales para garantizar la continuidad de los fasoneros —empresas que ponen las semillas para procesar— y evitar el cierre de las plantas.

Consultado sobre el futuro inmediato, Succi fue contundente: “El panorama es totalmente negro. No se sabe para dónde va a salir la Justicia. No ha tomado una sola decisión para llevar claridad. Y lo que hoy expresa la empresa es prácticamente una confesión de que no puede más”.