Misión Imposible Sentencia Mortal está lejos de anunciar el fin de una de las sagas de películas más exitosas y reconocidas de Tom Cruise. Este largometraje es una vuelta al Ethan Hunt más agente especial que nunca, un llamado introspectivo al personaje, y una primer capítulo de un final que promete ser abrumador.

Esta vez, el enemigo ya no es más el Sindicato de villanos que tuvo, entre otros, celebres miembros como Phillip Seymour Hoffman y Sean Harris, si no que será la Inteligencia Artificial, anclada en un submarino nuclear ruso varado en las aguas del Mar del Ártico, situación que inclusive, con un fabuloso manejo del drama, está inscripta en el comienzo del largometraje.

Inteligencia Artificial que tendrá acceso a todas las computadoras y todas las redes del mundo, y que representará un peligro para el poder armamentístico y político de los principales actores del mundo. Y que serán los que convocarán a Hunt a una nueva travesía que lo llevará por Abu Dhabi, Roma, y los Alpes suizos junto a sus leales Benji y Luther.

El desarrollo de la historia es el clásico de la marca Misión Imposible, y resulta no menos destacable el trabajo de Cruise para personalizar otra vez a un Hunt que es temeroso de todo, pero que sobre todo es un optimista. Las escenas que dan cuenta de esto ya fueron difundidas por la productora, porque son parte de la forma de llevar a cabo las películas que tiene el actor, pero el contexto donde las presenta sigue generando la intriga necesaria para disfrutarlas.

La película trae interrogantes del presente con las caracterizaciones de siempre de una historia que no necesita, necesariamente, conocer de los episodios pasados para ser clara, entretenida y llevadera. A gusto personal, el personaje de la Viuda Blanca, interpretada por Vanessa Kirby, se presenta nuevamente en su rol de “intermediaria” entre poderosas personas, pero nuevamente deja una sensación de no encastrarse de lleno en la trama, al igual que su papel en la edición anterior de la saga.

Misión Imposible Sentencia Mortal es la primera parte de una serie de dos películas que parecen marcar el final de la saga por cuestiones de tiempo (Cruise cumplió 61 años de edad) pero que continúan con una vigencia impecable en el funcionamiento de la historia. Sin embargo, el actor que caracterizó por primera vez al agente Hunt en 1995 continúa desarrollando un rol en las historias en donde está lejos de querer ser derrotado por el paso del tiempo, con la continua apuesta a lo que mejor sabe hacer, que son las películas de acción.

La película dura 2 horas 43 minutos, y actualmente se presenta en todas las salas comerciales de la región.