
Cuando todo parecía estar en orden y con total dominio de la escudería Mercedes, la máxima del automovilismo nos trae esas emociones y la incertidumbre de los años dorados de la categoría. Los coches de mercedes tuvieron un total dominio de la carrera desde la primera vuelta marcando una diferencia de hasta 30 segundos con el resto del pelotón donde se encontraba la italiana Ferrari.
El británico Lewis Hamilton, prácticamente sin la rueda delantera izquierda, se quedó con la cuarta fecha del campeonato de la Fórmula 1 en el Gran premio de Gran Bretaña la 7° victoria en casa y la 87 de su carrera. Momentos antes Valtteri Bottas había pasado por el mismo problema y perdió su segunda posición para quedar en la 12. Más atrás y cas en simultaneo, el español Carlos Sainz también padecía un pinchazo sobre el mismo lado (izquierdo) que tenía un sobre desgaste en las curvas pronunciadas del circuito de Silverstone (Inglaterra).
El podio liderado por Hamilton lo completó Max Verstappen en segundo lugar y Charles Leclerc que nuevamente entra al podio gracias a los problemas de los líderes.
El reemplazo del mexicano
Sergio “Checo” Pérez, que dio positivo de coronavirus, no pudo comenzar la competencia por un problema mecánico que lo dejó en el garaje. "Ha sido una montaña rusa emocional desde el jueves. Esto [no comenzar la carrera] es una gran baja para el equipo y para mí, el peor escenario posible", dijo el Alemán Nico Hulkemberg.
Humillante: el cuatro veces campeón Sebastian Vettel, que todavía no tiene equipo para el 2021, fue sobrepasado por un Alpha Tauri y finalizó en el 10 lugar alcanzando apenas 1pt. La escudería italiana está en el peor momento en su historia en la máxima categoría. Si bien en las últimas competencias estuvieron en el podio de la mano del francés Charles Leclerc, realmente no ha sido por mérito ni por un buen trabajo de equipo o mecánicos. Estos puntos fueron “regalados y ponchados de sopetón”. Los tifosis no han demostrado mejorías en la rodada del monoplaza desde el último encuentro.