La tormenta que se largó el jueves a la noche en varias zonas de la ciudad y la región llegó como un respiro después del calor sofocante que se vivió durante toda la jornada.
Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), la humedad bajó un poco en comparación con el día anterior, donde el combo de altas temperaturas y un ambiente cargadísimo hacía que todo se sintiera aún peor.
Para este viernes, el cielo arranca cubierto, aunque se espera que se despeje hacia la tarde. La máxima será de 27°C, con una humedad del 90%. Los vientos vienen del sur, de intensidad moderada, con algunas ráfagas fuertes.
Ya mirando al fin de semana, las temperaturas vuelven a subir, con máximas que rondarán los 30°C el sábado y los 32°C el domingo, en ambos días con cielos mayormente despejados y viento leve del sureste.