
No se encontraron resultados.
En la mañana del lunes, los trabajadores del gremio SMATA, no operaron la producción de la firma Pagoda S.A dado al despido injustificado de un compañero que no pudo aguantar sus necesidades fisiológicas tras la negativa de un superior que impidió que este fuese al baño.
Según cuenta Walter Cabrera secretario general del gremio que nuclea a los trabajadores mecánicos, el hombre de 42 años de edad, solicitó a su (jefe de turno o líder), que lo cubriese en la línea de embalaje para este poder ir al baño. Tras la segunda negativa del superior y la necesidad del trabajador, este debió orinar detrás de una caja de embalaje.
Ante esta acción del obrero, la empresa aplicó una sanción de cinco (5) días hábiles de suspensión sin consultar y/o avisar al gremio, (el hombre las acató) y al regreso, lo despidieron.
El gremialista asegura que “El despido es incausado, ya que la empresa tomó una sanción disciplinaria y fue cumplida por el trabajador. Por este motivo, la organización tomó la determinación de parar las actividades.
La empresa sigue sosteniendo el despido y el ministerio de trabajo provincial, ha intervenido en el caso.” Explicó.
Luego de la reunión entre las partes en el Ministerio de Trabajo de la Provincia durante el medio día del lunes, se resolvió una conciliación obligatoria por un periodo de 7 días hábiles.
“El compañero retomó su labor normalmente, el miércoles de la semana que viene se cumpliría el plazo de la conciliación y el día viernes al medio día, las partes están citadas en la delegación Rosario del Ministerio de Trabajo.
La empresa tomó una medida arbitraria sobre una sanción ya aplicada, yo pedí el legajo del compañero y este no tiene antecedentes indisciplinarios” finalizó Cabrera.