María José Díaz, una joven sanlorencina de 27 años que fue brutalmente golpeada por su ex pareja, Juan José Borda, hasta creerla muerta, teme que el acusado quede en libertad. Esto se debe a que el Fiscal que lleva adelante la causa pretende cambiar la carátula de “intento de homicidio doblemente agravado por el vínculo” a “lesiones leves agravadas”.

Esta mañana, la propia víctima acompañada por grupos de mujeres, reclamaron en las puertas de los Tribunales de San Lorenzo para que el fiscal del caso Leandro Lucente, no avance con el cambio.

“Estoy pidiendo que el fiscal no me cambie la carátula. Me dijeron que la iban a cambiar a lesiones leves agravadas. Me parece injusto porque hace tres meses que la estoy peleando con los chicos y si él queda en libertad corremos riesgo nosotros y toda mi familia”, manifestó.

“La quiere cambiar porque el informe médico que dio el Hospital Granaderos a Caballo y médico forense que me vio después no avalan que yo estuve en riesgo de muerte por los golpes que tuve”, señaló. Luego, contó que “cuando estuve internada la primera noche y ellos me vieron no se me notaba el hematoma porque era reciente”.

“Entonces para el fiscal no es suficiente lo que marca el informe para que sea una tentativa de homicidio. Tampoco le es suficiente la cámara Gesell de los chicos, ni que me envolvió en sábanas y me escondió abajo de la cama”, sentenció. Y agregó “el testimonio de los chicos fue contundente, pero el fiscal dice que le sirve para encuadrar que era un ámbito de violencia pero parece que no le sirve, por eso quiere cambiar la carátula”.

“Mis abogados tuvieron una reunión con el fiscal y el abogado de mi ex pareja, donde Lucente le comunica que va a cambiar la carátula el próximo jueves a las 13hs. Ahí va a dar la notificación. El lunes pasado me llamaron mis abogados y ahí me comunicaron lo que el fiscal les había dicho”, contó.

“Yo tengo miedo, porque si a él le bajan la carátula va a quedar en libertad y corremos riesgo tanto los chicos como yo. Ellos y yo estamos bajo tratamiento psicológico. Tenemos miedo porque va a terminar lo que él pensó que había hecho”, dijo la joven.

Luego, añadió que “me dejó de pegar porque me dio por muerta. Por eso me envolvió en sábanas y me metió abajo de la cama. Él pensó que lo había terminado, que me había matado, y si él sale lo va a terminar. Porque si con una prohibición de acercamiento que no respetó e hizo lo que hizo ¿Qué seguridad me da el fiscal si él sale en libertad? Ninguna”.

Relato de los hechos

“Lo único que me acuerdo de esa noche es que yo salí de la puerta del baño y él me dio con un velador. Después me acuerdo que yo estaba en el hospital y él entró esa noche que estuve internada. Había dicho que fue un accidente lo que me había pasado. Cuando después llegó mi papá y la enfermera les dije lo que había pasado, lo buscaron pero ya se había ido. Después no lo vi más”, contó.

Según contó María José, “llegué de trabajar a las 17:30 y lo que me relató mi hija es que nos fuimos a Beltrán a buscar unas cosas. Él volvió en la moto y yo caminando y hasta ahí recuerdo. Después me cuentan que empezamos a discutir y él me pega, y después ella se fue para adelante”.

Y continuó “después me encontró el nene cuando yo estaba en el piso y él me estaba pegando. El nene preguntó qué me había pasado y él le dijo “mamá está muerta”, y se va a avisarle a la nena. Cuando Mía entra, ya me había escondido envuelta en sábanas abajo de la cama. La empujó contra el baño y le hace mal la espalda, la dejó sin respirar”.

“Después agarró una bolsa y se fue. La nena me sacó de abajo de la cama, yo estaba convulsionando, llegó mi hermano y ahí me trasladaron en un taxi que justo pasaba”, agregó.

Acompañamiento

Por último, pidió el acompañamiento de la comunidad "para pedir que el fiscal no cambie la carátula, que me parece que tiene una cuestión de género, porque las pruebas están y la Cámara Gesell también”. “No se que más falta le hace para evitar que el fiscal cambie la carátula”, sentenció.