El suboficial Andrés Farías, de 41 años, falleció tras haber sido gravemente herido durante un asalto comando en el barrio Fisherton de Rosario, en el que un grupo de delincuentes robó $35 millones. Farías, que había sido baleado en el cráneo y el tórax mientras realizaba tareas adicionales de custodia, permanecía internado en el hospital de emergencias Clemente Álvarez (HECA) desde el pasado viernes. A pesar de los esfuerzos médicos, el policía murió este jueves. Por el momento, no hay detenidos en relación con el caso.
El asalto ocurrió el 27 de septiembre alrededor de las 8:45 de la mañana, cuando Farías escoltaba a un empleado de la empresa "El Emporio de las Golosinas" en un utilitario Renault Kangoo. Los hombres se dirigían a un banco sobre avenida Presidente Perón para depositar la millonaria suma cuando fueron interceptados por al menos tres delincuentes armados a bordo de un Ford Focus en la intersección de las calles Ambrosetti y Benegas.
Durante el ataque, los asaltantes dispararon varias veces contra el vehículo, hiriendo de gravedad a Farías, quien recibió dos impactos de bala, uno en el tórax y otro en el cráneo. Su compañero, el conductor del utilitario, logró escapar ileso. Los delincuentes robaron un bolso con el dinero y huyeron del lugar en el vehículo.
Tras el violento episodio, vecinos alertaron a las autoridades y una ambulancia del SIES trasladó a Farías al HECA, donde fue ingresado en estado crítico. Pese a los esfuerzos médicos, el policía no pudo recuperarse de la grave lesión neurológica causada por el disparo en la cabeza, que le provocó la pérdida de masa encefálica.
Horas después del ataque, el Ford Focus utilizado por los delincuentes fue encontrado abandonado a pocos metros del lugar del asalto. El vehículo tenía pedido de captura por robo.
Farías, quien era padre de dos niñas, trabajaba desde hace más de diez años en tareas de seguridad adicionales para la empresa afectada. El caso está siendo investigado por la fiscal María de los Ángeles Granato, de la Unidad de Homicidios Dolosos, mientras continúan las pesquisas para dar con los autores del asalto.