Agentes de la Secretaría de Control municipal trasladaron desde enero hasta julio de este año 252 vehículos que estaban preservados en inmediaciones de distintas comisarías de la ciudad de Rosario. Esta acción es a fin de ordenar el entorno de las dependencias policiales y mejorar la circulación peatonal y de automóviles. Los rodados fueron llevados al corralón o al depósito judicial, según el caso.

“Para nosotros es muy importante esta tarea ya que sabemos que cuando se acumulan vehículos en las zonas de las comisarías se generan dificultades para transitar y también se perjudica al vecino. Es importante aclarar que desde la Municipalidad sólo podemos intervenir cuando hay una orden judicial para que el rodado sea trasladado. Hasta que eso no suceda no podemos actuar”, destacó el secretario de Control local, Diego Herrera.

De acuerdo a los registros del municipio, desde el inicio del año hasta este mes de julio, los procedimientos (a cargo de personal de la Dirección de Proximidad, la Dirección General de Control Urbano y, sobre todo, la Dirección General de Tránsito) tuvieron lugar en distintas seccionales y se retiraron 252 vehículos entre motos, autos, pick up y utilitarios.

Algunas unidades estaban guardadas en el interior de las comisarías y otras permanecían estacionadas en los frentes. El traslado de las unidades al corralón municipal o al depósito judicial se planificó de acuerdo a la situación legal de cada caso en particular.

Desde la Secretaría de Control recordaron que el retiro de vehículos de las comisarías se actualiza de manera periódica, al igual que los controles de tránsito vehiculares en cada zona.

El objetivo en este último caso es evitar las dobles filas en los ingresos de las dependencias y/o que se estacione en los lugares reservados para la tarea policial, siempre con el fin de mejorar el flujo de circulación.