La familia de Ivana Garcilazo, la hincha de Rosario Central que perdió la vida por un piedrazo el pasado 30 de septiembre luego del clásico rosarino, viajó a Bolivia en busca de Damián Reifenstuel, tercer sospechoso.
Ya se encuentran imputados por homicidio agravado Ariel Cabrera y Juan José "Tuerca" Masson y permanecen en prisión preventiva.
Este martes, su hermana Silvana Garcilazo publicó un video en sus redes sociales desde Santa Cruz de la Sierra en Bolivia en el que contó que decidieron viajar porque varios testigos argentinos dijeron que el sospechoso estaba en Santa Cruz.
"Vendimos nuestros negocios y en Argentina se están haciendo rifas para recaudar fondos. Lamentablemente tuvimos que endeudarnos mucho para poder viajar, porque no recibimos ayuda de nadie de los que tienen que ayudarnos", agregó.
Ivana tenía 32 años, fue al Estadio Gigante de Arroyito para alentar al Canalla en el clásico disputado el 30 de septiembre. Al terminar el encuentro, salió con su moto para dirigirse a su casa acompañada por su novio Daniel, al llegar a Ovidio Lagos y Montevideo fue atacada con una baldosa que le impactó en el lado derecho de su cara quitándole la vida.
El ataque sobre Ivana fue presenciado al menos por tres testigos directos. Daniel, el novio de la muchacha asesinada quien se enfrentó con una linga cuando Cabrera se le fue encima para agredirlo. Una conductora que regresaba a su casa con sus hijos y su cuñado y circulaba detrás de Ivana. Ella fue una de las primeras personas que intentó auxiliar a la víctima. Y un taxista que estaba estacionado sobre Montevideo, a la espera del semáforo, vio a tres hombres tirando piedras a la gente que pasaba con ropa de Central.