El Jardín Maternal Coloreando de zona norte de Rosario, Chiclana al 900, fue clausurado por la municipalidad tras la viralización de imágenes donde se evidencia maltrato a niños de 1 a 4 años. Los padres indignados denunciaron públicamente el accionar de la directora que maltrataba a los niños ejerciendo violencia física y psicológica.

“A mi hijo por momentos le costaba venir, ahora por cualquier cosa que hacen piden perdón y hay chicos que han sufrido retrocesos, que estaban dejando los pañales y ahora volvieron a usarlos”, relató el papá de uno de los nenes e De 12 a 14.

La mujer fue finalmente expulsada de la Asociación de Jardines Particulares de Rosario.

"Es de público conocimiento, los hechos acaecidos en un Jardín de Infantes de Rosario. Sobran las palabras para hablar de ello, ante tanta evidencia. Pero es necesario hacer hincapié también, que hay Instituciones Educativas con años de trayectoria, que trabajan con profesionalismo y dedicación, que ofrecen espacios de cuidado, educación y amor para las primeras infancias. Queremos manifestar públicamente nuestro rechazo a los hechos de este jardín, pero dejando en claro y sobre todo a los papás y mamás de niños y niñas que envían a sus hijos e hijas a estas Instituciones, que este es un hecho aislado, como tantos otros hechos que ocurren en esta sociedad. Es así que los alentamos a que sigan apostando a las propuestas serias de aquellas instituciones correctamente habilitadas y supervisadas por la Municipalidad, construyendo con ellas, paulatinamente, la confianza necesaria para dejar a sus pequeños tesoros", expresaron en un comunicado desde la Asociación.

"Desde la Asociación de Jardines Particulares de Rosario, no podemos estar ajenos a los hechos, pero es importante que se conozca que nuestra injerencia se encuentra delimitada solo en objetivos e intereses comunes de nuestra tarea, función para la cual esta agrupación fue fundada y que no ejercemos funciones de regulación ni supervisión de las actividades que los jardines desarrollan en lo particular. Las evidencias son contundentes y más allá de los procesos legales, consideramos lo sucedido como falto de ética y moral, totalmente ajeno a nuestra profesión y desempeño como educadores de la primera infancia. Al respecto, informamos que ya se han tomado las medidas disciplinarias abarcadas en nuestro Estatuto. Esperamos que la resolución de estos acontecimientos se enmarque en la justicia y beneficie sobre todo a los más damnificados, que son, sin lugar a dudas, los niños y niñas de esa institución.", finaliza el comunicado.