El mes de marzo arrancó con incesantes lluvias, que aún tienen previsto continuar. Este fenómeno provocó un incremento en los caudales de los arroyos de Rosario y la zona, generando preocupación en la comunidad por posibles desbordamientos.. Este fenómeno meteorológico forma parte del cambio climático.

El Secretario del Área de Política Ambiental de la UNR, Matias De Bueno, en diálogo con 11Noticias señaló que este tipo de fenómeno era de esperar en un contexto de crisis climática. “No nos olvidemos que nosotros tenemos un promedio aproximado de unos mil milímetros anuales en esta zona, y en lo que va de marzo ya cayeron 310 milímetros. En lo que va del año, estamos aproximadamente entre los 480 y 500 milímetros acumulados”.

“Actualmente los fenómenos climáticos son cada vez más extremos, y eso es lo que nos va aumentando la cantidad de riesgos justamente. Esto es algo que es importante siempre tener en cuenta, que tiene que ver con las políticas públicas de planificación de adaptación a las crisis climáticas”, agregó.



De Bueno explica que desde hace mucho tiempo se observa una impermeabilización en las diferentes áreas que dificultan la absorción de los excesos de agua, debido a la escasez de vegetación y árboles. Esta situación provoca que el agua no se filtre adecuadamente, sino que escurra superficialmente, lo que resulta en una distribución desigual del agua. Algunas áreas que necesitan agua no la reciben, mientras que otras ya están saturadas y no pueden absorber más.

“No hay ninguna duda de que la crisis climática, ya es una realidad en la actualidad, de hecho si pensamos en la crisis climática, tenemos que pensar en la pandemia, en el dengue, en la sequía, en los incendios, en las inundaciones, en las pedradas, y lo importante es poder tener políticas de adaptación para poder recibir estos fenómenos climáticos que siempre van a ir en aumento, cada vez van a ser más extremos”, indicó De Bueno.

Para brindar una posible solución, o aminorar los daños “Hay que trabajar muy fuertemente en todo lo que tiene que ver con la regeneración y restauración, la regeneración ambiental es la única posibilidad que tenemos de retardar este fenómeno. Hay que estar muy atentos, cumplir las normativas, no generar daños ambientales excesivos o que estén fuera de lo que están las tolerancias que se pueden soportar, las políticas climáticas tienen que estar atravesadas en todas las gestiones públicas, porque cuando hablamos de economía, estamos hablando de ambiente, cuando hablamos de producción, estamos hablando de ambiente, cuando estamos hablando de bienestar social”, destacó.