La tensión por este tema se profundizó este jueves donde se difundieron varios comunicados.
“La sociedad no fue parte del debate previo a la reforma, y los partidos políticos -salvo excepciones- tampoco. No hubo una convocatoria amplia a la ciudadanía, a las instituciones intermedias, a los gremios, a los empresarios, a los colegios profesionales, a las iglesias. Y eso implica un déficit democrático que no puede repetirse en el desarrollo de la Convención”, indicaron desde Más Para Santa Fe.
Luego argumentaron que este año 2025 la agenda electoral es particularmente intensa en Santa Fe y que “en este contexto, convocar a la Convención Constituyente durante este período activo resultaría inoportuno e inconveniente”. Además consideran que “la reforma constitucional demanda tiempo, profundidad y una deliberación política y ciudadana acorde a su trascendencia”.
“La Constitución de nuestra provincia sentará las bases institucionales para las próximas décadas. Su discusión no puede abordarse como un trámite ordinario”, sentenciaron desde ls oposición.
Desde el espacio proponen iniciar el proceso de reforma en el año 2026: “Considerando el estrecho margen temporal y las implicaciones de sesionar en un escenario electoral activo, proponemos formalmente que la Convención Constituyente inicie sus deliberaciones en el año 2026. Este cronograma permitiría desarrollar el proceso en un contexto más propicio, con una agenda propia y la oportunidad de enriquecer el debate a través de un diálogo abierto y exhaustivo con todos los actores de la vida santafesina”.
Unidos, lejos de ceder, ratificó su decisión de que la Convención inicie sus trabajos a partir de julio del año próximo, tras reunir a todos sus convencionales en la ciudad de Santa Fe.
La disputa por la fecha es, hasta ahora, el primer gran enfrentamiento del proceso de la reforma constitucional por lo que se espera que el debate se desarrolle de la misma manera.