El martes, el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, junto a otros cinco gobernadores radicales, se encontró con Javier Milei en medio de las tensiones políticas por el presupuesto nacional. Pullaro esperaba llevarse compromisos firmes en infraestructura, pero las promesas terminaron diluidas entre pedidos de “déficit cero” y un contexto económico difícil.
Tras la reunión, Pullaro apareció en TN, donde se enfrentó a preguntas incómodas sobre la situación de Santa Fe. Cuando el periodista Diego Sehinkman le preguntó directamente si había conseguido algo concreto, el gobernador respondió evasivamente: “Siempre pedimos obras, pero hay que entender la situación del país”. Insistió en que había “esperanza”, pero sin nada específico para mostrar.
En otro momento, Pullaro admitió que Milei no le dio certezas. La reunión dejó más dudas que respuestas, y el gobernador habló sobre la importancia del equilibrio fiscal y las dificultades económicas. Ante las críticas de la UCR hacia Milei, Pullaro prefirió evitar confrontaciones: “Como cristiano prefiero perdonar y mirar hacia adelante”, expresó.
Además, dejó abierta la posibilidad de alianzas políticas: “No descartamos nada, cualquiera que coincida con nuestro programa puede sumarse”, indicó, sugiriendo la idea de un frente común con La Libertad Avanza en Santa Fe.
Mientras tanto, en la provincia, Pullaro enfrenta controversias por el manejo de las protestas contra la reforma previsional, incluyendo allanamientos a viviendas de manifestantes. “Es un modelo de gestión incómodo, pero necesario”, defendió el gobernador.