El presidente Javier Milei volvió a viajar a Estados Unidos para un encuentro de personalidades ligadas a su par del país del norte, Donald Trump, en un nuevo ostentoso gasto que poco de relevante trajo a lo que es una posible inversión en Argentina.

Milei viajó a las cercanías de Miami para recibir el premio “Leon de la Libertad”, en el marco de la gala “American Patriots”, un encuentro de conservadores ligados al presidente estadounidense que tuvo al argentino como uno de los invitados.

Como en cada oportunidad, Milei viajó con su hermana Karina y se los vio a ambos cenando, con poca personalidad relevante alrededor.

Por una falla técnica de la logística de Trump, Milei no pudo tener una foto y se frustró el encuentro entre ambos, algo que sin embargo está más ligado a lo simbólico que a cualquier tipo de vínculo político y comercial en esta oportunidad.

Esta nueva excursión de la pareja de hermanos presidencial es un nuevo gasto de miles de dólares que, en esta oportunidad, solo pagaron un plato de comida en una ostentosísima gala que solo mueve el amperímetro de un puñado de influencias políticas estadounidenses que no tienen intención alguna en invertir en Argentina.