La baja frecuencia del servicio generó múltiples reclamos de los vecinos, quienes se ven obligados a recurrir a medios de transporte alternativos o enfrentar largos períodos de espera en las paradas de autobús.

La situación se agrava debido a las deficiencias en las condiciones de los servicios,unidades viejas y la falta de control sobre la frecuencia. Vale aclarar que la monopólica empresa Rosario Bus aumentó sus tarifas y recibe el subsidio a través del boleto SUBE. La ausencia de una Oficina de Defensa al Consumidor en la ciudad también dificulta la canalización de reclamos relacionados con el transporte público.

"Los usuarios se ven perjudicados por la falta de transporte, lo que los obliga a trasladarse por otros medios más costosos, poniéndolos en una situación de mayor vulnerabilidad aún", afirmó el Concejal Mandón.

Concejal Luciano Mandón

"Es evidente el aumento de personas en las paradas de colectivos, lo que demuestra la urgente necesidad de mejorar la frecuencia del transporte público", abundó.

Además, el concejal apuntó contra la suba del boleto y la falta de controles. "La falta de control de las frecuencias, el aumento del boleto y las deficientes condiciones del servicio son inaceptables. Los ciudadanos merecen un transporte público digno".

Ante este panorama, el Concejo Municipal emitió una resolución respaldando los reclamos de los vecinos y solicitando al Departamento Ejecutivo Municipal que tome medidas concretas. Se insta a realizar gestiones con las empresas prestadoras del servicio para obtener información detallada sobre la frecuencia de los colectivos y el estado de mantenimiento de las unidades.

El pedido se suma a una larga lista de concejos y municipios que advierten el mismo problema. Es que desde la pandemia, y luego con el recorte del gobierno en el Fondo Compensador del Transporte Público, la empresa retiró unidades del recorrido Rosario - Andino y frecuencias en horas picos.