En la noche del martes, la Policía Bonaerense detuvo a otro hombre de apellido Cejas que estaría vinculado con el crimen de Tomás Tello, por lo que de esta manera ya son diez los apresados por este caso.
El dato sobre este décimo involucrado se relaciona con los dichos del abogado defensor de tres de los imputados sobre la vinculación de más personas. Según confirmaron, "un testigo declaró que vio pegar a uno de remera rayada y ese es al que detuvieron".
El cuerpo del joven de 18 años, asesinado por una patota en la localidad balnearia de Santa Teresita, fue trasladado al cementerio municipal de General Lavalle, en el paraje Pavón, donde fueron inhumados en una ceremonia íntima.
Una larga caravana de autos y vehículos acompañó el cortejo, luego de un breve responso, ya que los padres del joven no quisieron que se realice el velatorio, pese a lo cual varios vecinos y allegados se concentraron en la casa mortuoria.
La madre del joven habría pedido "privacidad" a la hora del entierro, en medio del dolor por el crimen, que conmovió a la pequeña localidad balnearia en el comienzo de la temporada veraniega.
El chico fue asesinado mientras celebraba la llegada del Año Nuevo en las playas de Santa Teresita, pero allí se produjo una discusión, un grupo lo persiguió y lo acorraló a pocas cuadras de allí, en calle 44 y Costanera, donde uno de los agresores le asestó un puntazo a la altura del tórax.
De acuerdo al informe inicial de la autopsia, Tello murió producto de un ataque con un objeto cortopunzante en el pecho.
NA