El Gobierno Nacional dictaminó una serie de
nuevas regulaciones para lo que compete a los Registros del Automotor en todo el país. A través del Ministerio de Justicia, se confirmó una
reducción del 30% de la planta de trabajadores de estas dependencias, como también el cierre del 40% de los locales de atención al público.
Este porcentaje equivale a la cantidad de registros del automotor que se encuentran bajo intervención, muchos de ellos desde hace más de dos años. Esos mismos, según el comunicado de la cartera judicial, serán los primeros en cerrarse.
A su vez, el Gobierno confirmó que a partir de mayo deberán financiarse los costos operativos en su totalidad con el cobro por sus servicios, “adecuando su ingreso a la tarea efectivamente desempeñada y su productividad”.
Entre estas nuevas regulaciones que surgen tras la primera de las auditorias a la Dirección Nacional de Registros de Propiedad del Automotor y Créditos Prendarios, estará la eliminación de algunos documentos que hasta el momento debían incluirse en los papeles a completar luego de realizar la compra de una unidad.
En esa dirección, se eliminará el Certificado de Transferencia Automotor, el que debía presentarse a la AFIP, y la
tarjeta azul, que acreditaba el permiso de circulación de un vehículo. Ahora solo deberá exhibirse la cédula verde física o digital, aunque no sea uno mismo el propietario del auto.
Habrá, según el gobierno, una eliminación progresiva de los legajos físicos hasta una digitalización total de los mismos.
Por último, se implementará un Régimen de Concursos transparentes “para
impedir la contratación de personas que hayan tenido cargos políticos durante los últimos 10 años, sus familiares y aquellas personas que no acrediten los requisitos de idoneidad y experiencia en la actividad privada para cumplir tal función”.