Un descarrilamiento de un tren con contenido químico en la localidad de East Palestine, en el estado de Ohio, Estados Unidos, provocó un desencadenante de hechos que podrían concluir con toda una ciudad deshabitada por la alta exposición a elementos perjudiciales para la salud.
El hecho ocurrió el pasado martes, cuando la formación de más de 100 vagones descarriló y se produjo un importante incidente en esta localidad en el límite con Pensilvania. 20 de esos contenedores transportaban cloruro de vinilo, un material que es utilizado para la fabricación de resina de plástico rígida poricloruro.
La exposición de este material al aire libre es altamente contaminante. Este material está asociado a la aparición de cáncer, principalmente el hepático, según manifestó una agencia federal estadounidense que investiga las causas de este tipo de enfermedades.
Tras el incidente, toda la localidad de poco menos de 5000 habitantes quedó paralizada, con clases suspendidas y actividad comercial mínima, mientras los equipos de emergencia trataron de remover el desastre causado por este “tren bomba”, como se denomina en este país a las formaciones que transportan materiales altamente peligrosos e inflamables.
Mientras tanto, las autoridades investigan cómo se manejó esta emergencia, y la posibilidad de que por negligencia, el incendio haya sido causado de forma, en principio, controlada y que ello haya desencadenado una explosión peor, la cual podría contaminar para siempre esta ciudad y dejarla inhabitable.