Estado presente o Estado reducido a la mínima expresión es parte de la discusión del futuro de la Argentina que se debate en el Senado de la Nación Argentina con la Ley de Bases y el Paquete Fiscal y con distintas iniciativas que impulsa el gobierno nacional desde el pasado 10 de diciembre. Las propuestas oficiales despertaron la reacción de la clase obrera por su fuerte contenido de libre albedrío a sectores de gran poder económico y una gran presión sobre el sector productivo y del trabajo.

En este marco, el secretario General del Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo, Capitán Mariano Moreno, dijo que se trata de “una invitación a desandar el camino de la meritocracia que promete igualdad de oportunidades”, y agregó: “Los liberales aman la idea de la meritocracia y se oponen a las políticas redistributivas”.

“Estas políticas lo único que cuentan y pretenden dejar subsistiendo es el mercado, bien lo dicen, pero para nosotros el ser humano no es el mercado y la sociedad argentina a veces se olvida un poco de donde viene”, reflexionó Moreno, y añadió: “El Estado tuvo y tiene una función muy importante en la vida y el desarrollo de los ciudadanos argentinos, sobre todo aquellos que somos trabajadores, aquellos que para poder estudiar, desarrollarnos, poder tener un trabajo, desde que éramos muy pibes contábamos con un servicio público de pasajeros que nos daba la posibilidad de una forma accesible y sostenible de llegar a un determinado lugar; yo no hubiese podido estudiar por ejemplo, como muchos otros compañeros, si no tuviésemos un colectivo, un tren, una escuela pública”.

“Si repasamos nuestra vida, tuvimos al Estado en cada esquina y nos dio la libertad de elegir”, analizó el gremialista y destacó que “nos hacen creer que nosotros logramos ciertas metas, simplemente por el esfuerzo personal y cuando repasamos estuvieron nuestros viejos, la familia, los amigos, vecinos y el Estado” .



Consultado sobre la reducción del Estado y las políticas de contracción en todas las áreas, Moreno resaltó que “al Estado hay que hacerlo eficiente , eso sí, y hacerlo partícipe de y que sea la palanca para que el pueblo tenga acceso a lo que necesita y por sobre todas las cosas tenga posibilidad de desarrollo”, y añadió: “Sobre todo el pueblo que no tiene las herramientas, porque sino se transforma en una meritocracia donde en la cima se encuentran quienes son considerados (y se consideran a sí mismos) los más merecedores . Merecen su estatus social, así como sus altos ingresos. Quienes se encuentran en el otro extremo de la escala social, por su parte, son considerados no merecedores de nada excepto su destino; es muy preocupante”.

¿Qué lugar ocupa el Movimiento Obrero?

Las críticas hacia el movimiento obrero crecen y son injustas, el gobierno supo capitalizar los errores o desvíos de algunos para meter a todos en una misma bolsa, sin contemplar o separar a cientos de organizaciones gremiales que trabajan alineados a las necesidades de sus representados y con sana democracia sindical.



En esa línea, Moreno puntualizó que “de una buena vez por todas, el movimiento obrero tiene que darse cuenta que cuando suceden estos procesos, es el movimiento obrero el que tiene que ir a la calle, el que recibe los palos y pone los muertos de la represión”.

“Tiene que plantarse en ocupar un lugar mucho más importante en los ámbitos donde se discuten las políticas de desarrollo”, sostuvo el capitán.

Como objetivo, el dirigente planteó que la meta “es que haya una representación mucho más importante, y no exagero en decir que como mínimo tenemos que tener un 33% del Congreso de extracción sindical , que vengan de los trabajadores. Y cuando hablo de trabajadores, hablo del trabajador de base, del obrero, del que pone su esfuerzo físico y mental, del que sabe de qué se trata madrugar, viajar mal, doblar el lomo, dejar su hogar, exponerse a los climas extremos, a los que se capacitan permanentemente para mantener sus habilidades técnicas las cuales ponen al servicio del desarrollo productivo."