En el marco de una jornada nacional de lucha convocada por trabajadores del sector científico y técnico, ATE Conicet Rosario realizó este miércoles una intervención artística y una olla popular en la sede local del organismo. Bajo la consigna “como eternautas en la llovizna neoliberal”, las y los trabajadores se manifestaron contra el desfinanciamiento de la ciencia y tecnología y denunciaron despidos encubiertos.

La jornada comenzó pasadas las 10 de la mañana con una volanteada y recorrido por los institutos formadores de profesionales, y continuó con distintas intervenciones culturales y un locro popular. La iniciativa se articuló con la Red de Autoridades de Institutos de Ciencia y Tecnología (RAICYT), ATE Conicet Capital y otros colectivos que se movilizaron al Polo Científico de Buenos Aires, coincidiendo con una reunión del Directorio del Conicet.

Entre los reclamos principales se destacaron la recomposición salarial mediante paritarias libres y sin techo, la continuidad de becas y proyectos, y el aumento de presupuesto para el área. Además, exigieron la efectivización inmediata de cargos dispuestos en 2022, la publicación de los resultados de la convocatoria a cargos 2023 y la continuidad en los llamados para nuevas incorporaciones.

“Los fondos previstos para este año son menores que los que tuvimos el año pasado, con lo cual se proyecta que no puedan realizarse la totalidad de los ingresos pendientes y afectará al funcionamiento de los centros científicos tecnológicos”, advirtió Marianela Scocco, delegada de ATE Conicet Rosario.

Desde el gremio señalaron que la política del gobierno nacional provoca un vaciamiento del sistema científico. “Se trata de despidos encubiertos: hay menor ingreso de becarios, personas que se van del Conicet al sector privado, al exterior o migran a otras áreas por necesidad de supervivencia. Estimamos que en 2024 hay 1300 personas menos en el organismo entre renuncias, jubilaciones, despidos y falta de becas”, detallaron.

Lorena Almirón, secretaria general de ATE Rosario y de la CTAA local, fue contundente: “Las propuestas del gobierno nacional son una burla en materia salarial. Desde ATE apostamos a las asambleas, decimos que luchar sirve y seguimos saliendo a la pelea en unidad, como lo hicimos ayer con los gremios del transporte marítimo y fluvial. El vaciamiento, que venía de antes, se aceleró en los 19 meses de gobierno de Javier Milei, llevando áreas emblemáticas casi a la inexistencia".