Un avión privado, una mansión, y medio millón de euros por publicaciones en Instagram que mencionen a Arabia Saudita. Todo este farandulero contrato recibió el brasileño Neymar para sumarse, hasta el 2024, al Al Hilal de la Saudi Pro League.


Nada más y nada menos que 320 millones de euros terminará cobrando el delantero de 31 años de edad por las próximas dos temporadas en el fútbol de medio oriente. Un dineral inigualable para cualquier economía deportiva de todo el planeta, pero un monto del cual los árabes hacen alarde y pagan sin dudar a las figuras del fútbol mundial.


Neymar cobrará 13 millones de euros de forma mensual en el club donde fue técnico Ramón Díaz y ganó una Champions League asiática, lo que le permitió acceder al Mundial de Clubes de este 2023 en donde perdió la final contra el Real Madrid.


La figura más importante de la Saudi Pro League es Cristiano Ronaldo, quien juega en el Al Nassr y recientemente se consagró campeón de la Copa de Campeones Árabes (la copa Rey Salmán), torneo que disputan los campeones de las ligas que integran los equipos de países musulmanes.


Ya habían sido tentados Kylian Mbappe y Lionel Messi con los suculentos contratos saudíes, ambos futbolistas del Paris Saint Germain, club que sufre un exilio de sus principales referentes futbolísticos tras un proyecto ya frustrado de conquistar la Champions League bajo la financiación de los qataríes, quienes a su vez son rivales geopolíticos de Arabia Saudita.