Ambos tuvieron la misma cantidad de puntos en el Apertura y con realidades parecidas. Newells, dirigido por Cristian Fabbiani, quedó a solo dos unidades de ingresar a los cuartos de final y llega tras vencer por penales a Kimberley en su debut copero. Defensa, en tanto, también finalizó su campaña regular sin poder clasificar, pero con un triunfo sólido por 3-1 ante Racing de Córdoba en su primer partido de Copa Argentina. El el que gana avanza, y en caso de empate habrá penales.

Uno de los condimentos especiales del partido será el reencuentro entre viejos conocidos: Ever Banega y Kevin Gutiérrez, quienes compartieron equipo en el exterior, se enfrentarán por primera vez en el fútbol argentino. También será una prueba importante para Cristian Fabbiani, que en su primer semestre como técnico en la Lepra busca un triunfo de peso para consolidarse en el cargo y proyectar una segunda mitad del año con mayor ambición deportiva.

En la previa, ambos planteles mostraron mesura en sus declaraciones, aunque dejaron en claro que la Copa es prioridad. Desde Rosario, el objetivo está claro: competir con seriedad, dar pelea hasta el final y demostrar que el equipo está en crecimiento. En Defensa, en cambio, ven este torneo como una plataforma ideal para volver a los planos internacionales. Es una competencia que conocen bien, y donde ya supieron destacarse en ediciones anteriores.

El ganador de este duelo enfrentará en octavos al vencedor del cruce entre Boca Juniors y Atlético Tucumán, por lo que el premio no es menor. Ambos clubes sueñan con seguir en carrera en el certamen más federal del país, que otorga una plaza a la Copa Libertadores y suele brindar sorpresas cada año. En un semestre irregular, la Copa Argentina aparece como la última gran oportunidad para cerrar la primera parte del año con una sonrisa. En San Nicolás, Newells buscará mostrar su mejor versión, recuperar la confianza y encaminar su proyecto. El Halcón no se lo hará fácil.