El hecho se produjo en la octava división del Club Barrio Quinta de Capitán Bermúdez. Alejandro Nicolini, entrenador de la categoría, organizó una rifa con el fin de recaudar fondos para que los chicos de su equipo tuvieran sus elementos para practicar y camisetas para los partidos del fin de semana.

La rifa contó con diversos premios, incluyendo botines, champagne, juegos de sábanas y cortes de pelo. Sin embargo, se presentó una situación para Gabriel Ojeda, uno de los jugadores de la categoría. Después de un partido, Gabriel dejó sus pertenencias, incluyendo camisetas, botines y canilleras, en una bolsa de basura por accidente y su tío, creyendo que era basura, la tiró sin darse cuenta de lo que contenía.

Ante esta situación, el DT utilizó las redes sociales para pedir ayuda y consultó si alguien tenía botines para donar, ya que el jugador debía disputar un partido el sábado. Alguien prestó un par de botines usados pero en excelente estado, justo del tamaño que necesitaba Gabriel para jugar ese sábado.

Sin embargo, durante el sorteo de la rifa, Gustavo Zalazar resultó ganador de un par de botines que la institución había sorteado. Conociendo el caso de su compañero, Gustavo le dijo:

"Toma Gabi, te los regalo amigo. Yo no tengo botines nuevos, pero los míos todavía sirven."

El caso de generosidad inundó las redes sociales y el club bermudense expresó en su cuenta de Facebook: “Creo que vamos por buen camino. Chicos de la categoría octava que hoy una vez más nos dan una lección de vida. La solidaridad, el compañerismo y la amistad van juntas de la mano y el hacer rodar una pelota dentro de la cancha hace la unión y la fuerza”.